lunes, julio 28, 2008

Veo veo...


El otro día me levanté de la siesta con la sensación de ser el prota de Prison Breik, no por sentirme como si hubiera estado en la cárcel, sino porque mi cuerpo parecía un tatuaje andante.
JERONTOLOGÍA
Saludos, amigos de la fauna y la flora, bienvenidos al programa de naturaleza de los lunes por la mañana. Mi nombre es Carmelo Cotón Maduro y seré su guía por el sotobosque de asfalto en este viaje de exploración. Nuestro objetivo de hoy es el Típicus Viejalis Almeriensis, tan comunes en las colas de los supermercados y por la zona del paseo marítimo. Para localizar a nuestra víctima... digo, presa... digo, objetivo, vamos a hacerle un recado a Alfredo y para ello nos subiremos en el Lentipso, el bus de la línea de la universidad, a esperar a que vengan a la playa a su hora atípica (la típica es las seis de la mañana).
Bueno, ya estamos aquí, subidos en el Lentipso y camino de la universidad. Estoy viendo... sí... el típico espécimen que se aproxima hacia nuestra posición embutido en su gorra clavada hasta el cogote y los pantalones subidos hasta los sobacos. Vamos a ejecutar la técnica básica infalible para captar su atención, o sea, vamos a ignorarlo completamente poniéndonos los auriculares y mirando hacia la ventana contraria; este método es muy efectivo porque todo el mundo sabe que los Viejalis sienten el instinto natural de evangelizar y aleccionar sobre la vida a cualquier persona menor que ellos.
Efectivamente, nuestro objetivo ha picado el anzuelo y lo tenemos aquí sentado a nuestro lado a la voz de "si no te importa me voy a sentar aquí", pero me apuesto lo que quieras a que aunque me hubiera importado lo habría hecho igual. Efectuada la maniobra de aproximación, nuestro objetivo va a intentar establecer contacto verbal con nosotros a la voz de "¡hay que ver qué calor que hace!", o sea, que nos va a dar conversación queramos o no, así que lo mejor es responder educadamente. Observemos la conversación:
-¡Hay que ver qué calor que hace!
-Pues sí, la verdad es que sí, aunque tampoco se está tan mal.
-¡Qué se va a estar mal! Cuando yo era joven no había ni edificios que te dieran sombra y ahora hay hasta líneas de autobuses.
-Sí, bueno, y también hay fuentes donde refrescarse por el paseo, que así por lo menos no te quedas tirado si te mareas del calor.
-Hace cuarenta años, que había que ir andando a todos sitios bajo el sol y que si te daba algo no había nadie que te ayudase...
-Bueno, yo de hace cuarenta años no puedo opinar porque no lo he vivido.
-¡Qué vas a haberlo vivido tú! ¡Si eres un crío!
...Y no se me ocurrió qué más decir. El Viejalis Almeriensis es una especie difícil de tratar en su estado natural, sobre todo porque da por hecho muchas cosas de las cuales es imposible hacerle cambiar de opinión: Todas las obras van muy lentas (cuando no tienes nada más que hacer que mirarlas a diario), antes se vivía mejor (cosa completamente contradictoria a lo anterior), los jóvenes de ahora no escuchan (pero el "crío" lleva ya veinte minutos oyendo su monólogo) y, mi favorita, si no vas vestido con traje es porque eres un inculto y un delincuente. Este hecho quedó patente cuando, al decirle yo que iba a la universidad por un recado, no porque fuera a estudiar, me respondió que "no, claro, por supuesto", sólo porque iba con mi uniforme de frescor estival (camiseta, pantalones remangados y zapatillas de deporte, de venta en farmacias).
Terminado el contacto verbal, nuestro objetivo alcanza su destino y procede a dejarnos con la palabra en la boca a la voz de "bueno, venga, adiós", ya harto de la conversación que él mismo ha iniciado. Como siempre, hemos conseguido el objetivo marcado y hemos podido estudiar a esta especie tan típica como es el Viejalis Almeriensis en su hábitat natural y en compañía de su mujer, que no dijo nada durante todo el encuentro. Despedimos la conexión con intención de contratar otra nueva y esperamos verles en el próximo programa.

miércoles, julio 23, 2008

YYL


Hay que ser muy muy macho para llevar la YYL. Si la X es de extra, la Y será de macho (según Mendel). Creo que venía con un frasco de esteroides de regalo y todo.
NADA
Estos días no estoy escribiendo nada, no porque no me apetezca, sino porque no me está ocurriendo NADA. No he salido a ningún sitio, no he tenido vacaciones, no ha venido nadie a verme, no tengo a nadie con quien pasar el rato (diariamente), mis amigos suelen estar ocupados o fuera y, lo peor de todo, no hay nada que yo pueda hacer para cambiar eso (excepto despedirme del trabajo). Es casi como si estuviera castigado por haber sacado malas notas pero en plan justicia kármica, ¿ya se me ha pasado la suerte? ...Y encima tengo el bloqueo del esfritor (persona falta de inspiración por quedarse frito al sol).
Es que imaginaros por un momento mi mundo interior: Medianoche, ponen las noticias. Me siento en mi sillón y me dispongo a escuchar lo que dice el profesor Peter Cios sobre el resumen del día.
-Las noticias de hoy son que no ha ocurrido absolutamente nada de nada, ni mucho ni poco, te quedas mirando la vida pasar (al ritmo de unas maracas, claro).
¿¡No ha ocurrido nada!? ¿Cómo que nada? Si he ido a trabajar, he comprado el pan, me he conectado un rato al ordenador, he visto la tele mientras comía, he hecho un par de recados, he vuelto a casa para hacer la cena, ordenador otra vez y a la cama...
Apago la televisión y me voy a hablar con mi musa... y cual es mi sorpresa cuando me encuentro una nota suya que dice "1/2 kg de zanahorias, pasta de dientes, spagettis..." y por el otro lado algo del estilo a "lo siento, no TE aguantaba más" colgada en el marco de la ventana abierta de par en par. "¡Qué hija de píscola!" - pienso yo - "Se va sin hacerme la compra, con todo lo que he hecho por ella". Y entonces me acuerdo de la vez que la dejé hacer un trabajo de literatura por mí, de cuando hablaba en clase de comentario de textos americanos, de cuando no se me ocurría qué decir en clase de semántica inglesa y me susurraba los temas, de cuando tuve que analizar los sonetos de Shakespeare y la dejé ofrecerse voluntaria para hacerlo y, tras descartar la bipolaridad y la esquizorenia, me di cuenta de que, como escritor, soy un esclavista. Si es que la musa es una amante incodicional, más que nada porque cuando te deja lo hace de verdad, da igual en qué condiciones.

jueves, julio 17, 2008

Agua


Hoy me he levantado con ganas de cariño. Tantas cosas tan importantes como el agua en la vida pero igual de escasas...
SUMERGIDO EN TI
Llévame al río del amor, báñame en tu agua y límpiame el dolor. Déjame en el océano de la paz, agua alrededor, siento tu presencia aquí. Sabes que sí, estoy sumergido en ti.
Llévame a la marea de tu corazón. Llévame a la costa y abrázame con pasión. Déjame ahí en la puesta de sol, agua frente a mí, siento tu calor. Sabes que sí, estoy sumergido en ti.
Dime hola pero no hay despedida, por si no sabes leer entre líneas. He encontrado algo que no puedo ocultar, unos ojos en los que quiero nadar.
Llévame al puerto de tu ilusión, embárcame hacia el mar de tu corazón. Agua de un arroyo natural, cojo un poco para mí, veo que sabe a ti. Sabes que sí, estoy sumergido en ti.
En este agua quiero vivir. Sabes que sí, estoy sumergido en ti.
Per Gessley - Drowning in You
(traducida libremente por mí mismo para que rime un poco en español)

martes, julio 15, 2008

Te lo juro, tía


Tendría que haber sacado otra foto con el contraste para demostrarlo pero es que fue superraro ver la oficina de ese banco encendiéndose y apagándose constantemente mientras Alfre sacaba dinero. Veee hacia la luuuz... (¿Cuál de todas?).
CUANDO RUGE LA MARABUNTA
Hola, chicos, bienvenidos a la clase de ciencia, concretamente de PAciencia. Soy el profesor Peter Cios y hoy os voy a enseñar la diferencia entre paciencia y los instintos homicidas que residen en lo más profundo de cada uno. Por ejemplo:
-La secretaria interrumpe tu explicación del estilo indirecto en inglés por tercera vez para comentarte que uno de los alumnos no ha venido, que necesita unos documentos para formalizar un curso y que hablamos muy alto explicando. Eso, el hecho de no romper el objeto de mobiliario más cercano con la frente de un golpe, es paciencia.
-Cinco minutos después de que la secretaria se vaya, suena una alarma de ambulancia que tiene el jefe dentro de la academia (con sonido real, las pilas se venden por separado) para indicar el fin de los exámenes de los mayores mientras grita para elevar su voz por encima de la "música celestial" que emite ese cacharro del infierno. Eso, las ganas de estrangularlo lentamente con una cuerda de piano mientras le pones unos altavoces con la canción de Heidi a todo volumen en el oído, son instintos homicidas (y el sueño de cualquier currifichante, por lo visto).
Puede darse el caso de que no tengamos paciencia a mano y tengamos que tirar de cualquier apaño para no convertirnos en unos desalmados sin razón aparente ni ser Ana Rosa Quintana. En ese caso, os recomiendo que penséis que todo esto no puede empeorar y que va a pasar pronto... cosa que siempre es mentira, pero te tranquiliza temporalmente. Si ya, por la razón que sea, sucumbís a la tentación de estrellarle la grapadora (cargada y +5) en la frente a quien sea y no sentir remordimientos, vuestra mejor opción es, antes de eso, acostaros con media España hasta que os puedan relacionar remotamente con cualquier personaje famoso. Ya sabemos que los "famosos" de España no siguen la misma ley que el resto de las personas así que estaréis completamente a salvo (y encima cobraréis por salir en los programas del corazón cuando os interroguen y os salga la bilis por la boca).
Bueno, chicos, esto es todo por hoy. Espero que ahora sepáis diferenciar entre un maníaco homicida y alguien con stress (principalmente porque uno es capaz de cualquier cosa ya que no tiene remordimientos y el otro es un asesino). De tarea, me copiais en Quijote en Braile, y nada de utilizar el rayador de queso de la cocina, que luego no me entero de nada.

jueves, julio 10, 2008

Elfo drow


La piel negra azabache y el pelo blanco nuclear, así son los elfos drow de mi época de Dungeonero catedrático de las reglas y libros de hechizos de todas las profesiones (menos druida, que fue la que menos llevé). Tendré que dedicarle un capítulo también a esa etapa, pero antes...
PARADOJAS
Hace tiempo que las escribí en Alter & Ego y no quería que pasaran desapercibidas así que las rescato de los abismos virtuales y añado un par más.
-Mi DS y mi teclado son blancos pero activando una opción del Paint de Windows se pueden volver negros. Todo lo blanco se puede volver negro en un momento.
-Cuanto más pelea una persona, menos le gusta pelear, mientras que las personas más violentas son las que no han peleado nunca. Los mejores diplomáticos siempre han sido grandes guerreros antes.
-Las teclas más duras son las que mejor trato han recibido porque el muelle está nuevo y funciona mejor. Cuanto mejor uso le das a algo peor funciona luego.
-Algunos dicen que lo importante es participar sin importar el resultado y otros que la medalla de oro es la única que vale porque el resto sólo demuestran que has perdido. En la vida siempre es mejor que te reconozcan un mérito de plata que irse con las manos vacías.
-Cuando llevamos mucho tiempo sin gastar dinero luego cualquier gasto nos parece un derroche. El dinero sólo parece mucho cuando ganas poco y poco cuando gastas mucho.
-Se suele decir que el primer hombre que comparó a una mujer con una rosa fue un genio y el segundo un imbécil. El ingenio siempre evoluciona de sorpresa a expectativa cuando es demostrado públicamente.
-Cuando oigo a alguien hablando mal de mí me acaba por molestar y le respondo pero el sonido más molesto en una situación incómoda es el silencio. El silencio es el sonido más fuerte.
-Algo mal dicho por una persona es un error pero algo mal dicho por mil personas es una tendencia lingüística. Los conceptos de correcto y erróneo no tienen sentido cuando dependes de otra persona para que te los confirmen.
-Estos mensajes tan llenos de sentido surgen cuando no tengo nada que decir. A veces lo mejor que se puede decir es no decir nada, eso siempre dice algo.

lunes, julio 07, 2008

Peas for everyone


Pues eso: guisantes para todos. Así coméis verduras y no os falta hierro ni vitaminas y os sentís más positivos y reaccionais mejor ante la gente y os lleváis mejor con todo el mundo y os sentís en paz. Por eso, guisantes para todos.
REVELACIÓN
1. Ayer hice algo que no había hecho nunca: desconecté el móvil por voluntad propia y sin razón alguna... Y, de repente, el día tenía más de 24 horas. Todos los problemas de tiempo y de stress que tenía se esfumaron completamente durante mi ilocabilidad temporal (no sé si esa palabra existe pero, si se puede decir "miembras", puedo decirla tranquilamente) y pude realmente dedicar tiempo a esa persona que peor trato y que siempre estoy muy ocupado como para hacerle caso (YO). Se lo recomiendo a todo el mundo.
2. Uno sabe que quiere tener algo porque no se lo quita de la cabeza hasta que lo tiene, pero uno no se da cuenta de que necesita algo hasta que se lo han quitado o lo ha perdido. Es ese momento en el que tienes un vacío que nada ni nadie puede llenar y que nunca te habías dado cuenta de que lo tenías. Por eso cuando llega el verano y, aún teniendo más tiempo libre que antes, ves menos a tus amigos y haces menos cosas de las que hacías antes, uno se pone melancólico y recuerda cuando la vida era más dura que ahora (sin internet ni televisión satélite, quiero decir). Es preferible una vida en el mundo real que mil en el virtual, sobre todo porque la primera opción no requiere una cuota al mes (si no contamos la comida y la cama, claro).
3. Cualquiera que salga contigo de copas y de pubs y se divierta se considerará colega tuyo y te dirá que "eres un tío de puXX madre" (sin tener nada que ver con las meretrices), pero ¿cuánta de esa gente te acompaña luego a hacer fotocopias o te escucha cuando acabas de suspender un examen o canta contigo versiones propias de La Oreja de Van Helsing? (esta última sólo unos pocos seleccionados). Cuando se buscan excusas tales como un café o unas rebajas para ver a alguien aunque sea un par de horas tras coger el coche desde la otra punta, es cuando tienes un amigo. Me siento afortunado (sobre todo después de salir de los locales sin ventilación).

martes, julio 01, 2008

Azul eléctrico



Aquí no se ven, pero esa noche los mosquitos estaban de fiesta... y no sé si por el alcohol o porque las luces del local los tenían locos (no era agua, eso clarísimo).

CONTINUE?

A la mañana siguiente... bueno, muy pronto he pasado yo la noche para la tortura china que me tocó sufrir. Tras llegar a casa de mi colega, decidimos que era buena hora para dormir algo y levantarnos al día siguiente a desayunar. Ese era el plan, de hecho, ese era MI plan, pero cuando me di cuenta de que la ventana del dormitorio daba a una de las calles principales me quise morir. Un inciso: mi colega tiene una pensión, pude elegir cualquier otra habitación pero no, tuve que elegir la que tenía premio (la estadística otra vez). Coches pasando constantemente, ambulancias recogiendo borrachos, los propios borrachos cantando a voces por la calle, los vecinos hartos de los borrachos que salen a gritarles por la calle, la policía que ha oído revuelo que viene a ver quién grita, los borrachos que salen corriendo a voces (no entiendo el objetivo de huir de la policía gritando) para que no los detengan por beber en la calle, dos hijas de mi vida que se estaban peleando por el pintalabios o por el novio de alguna de las dos (no me enteré bien) a uñas y rimel (y gritos, eso que no falte) ...Y para colmo, oía los ronquidos de mi colega desde la otra habitación (es que me cambié a eso de las cuatro horas sin pegar ojo). Para que os hagáis una idea: Si habéis visto Harry Potter y la Pierda Filosofal, sonaba como el perro ese de dos cabezas que se encuentran, sólo que más fuerte.

En fin, una noche más tranquila que pasé... Lo mejor vino cuando tuve que coger el bus de vuelta, que ahí fue cuando ya la estadística se rió de mí descaradamente, porque siempre voy con la hora justa y esta vez me sobró justo una hora (qué chispa tengo, joer). Y al llegar a casa, tocaba ver el partido del mundial con mis adrenalizados colegas, que tenían el plan de cenar pizzas en el intermedio y al final fuimos Alfre, Noe yo a por ellas antes del partido porque el fútbol nos resulta tan interesante como las memorias de Rafaella Carrá. Entre tanta hostia fina, doble de queso y que casi me quemo por llevar las ocho pizzas a la vez llegamos casi en el intermedio (menos mal que se llama comida rápida). Resumen del partido: Café hasta que se hace la hora, 1'20€; ocho pizzas al gusto de cada uno, 61€; gasoil de ida y vuelta, 1-2€; oír la retransmisión del partido (porque no lo vimos al final) oyendo los alaridos de mis colegas desde la otra habitación mientras los forofos pasan calor y los de las pizzas comemos en el salón con aire acondicionado no tiene precio. Para todo lo demás, Master Hand (que no ha salido en el SSBB, vaya cosas).
Y me dejo por explicar la furia de los fanáticos que vimos en la Rambla mientras se metían en la fuente, que a saber cuánto tiempo lleva ese agua allí (alguno pilló poderes mutantes seguro); se subían en los techos de los coches durante los semáforos para hacer striptease (y al dueño no le importaba); soplaban las trompetas esas que emiten un ruido que mal dolor les dé a quien las use como si anunciasen el juicio final y se tuvieran que enterar los de Murcia; y por último, empezaban a echar el agua de la fuente sobre los coches que pasaban, que no se sabe si limpiaba o ensuciaba porque entre lo que tuviera el agua y los añadidos de la victoria se veía marrón en el cristal. Sobre todo, me encantó cuando llegó una ambulancia subiendo por la calle y la gente le hizo tapón tanto por delante como por detrás y no se podía mover. Vamos, que pa una emergencia estamos. Por cierto, felicidades a la selección. ¡Campeones de Europa! Ya que en Eurovisión no nos comemos una rosca...

Mordor

...Y de esa manera, sobre la ciudad de plata de las tierras heladas de Vaiarrask, cayó la noche (tirad esquivar) ...Pero en realidad es Granada.

RISK

Creo que es el juego que más incidentes políticos ha ocasionado en reuniones familiares justo detrás del Monopoli (el rompefamilias por excelencia). No es que me haya ido a Granada a jugar a la guerra, el símil es por lo de las ocupaciones durante el fin de semana, que la verdad es que no he parado apenas... y ya dormir ni te cuento.

Ante todo, se nota que uno sale de una ciudad costera en cuanto todo el mundo de repente te dice que tienes suerte de tener la playa cerca y tú no entiendes por qué. El ser humano es un inconformista que lo quiere todo a la vez y luego no aprovecha nada... en teoría. Vale, la playa para los granadinos es algo raro porque a ellos les pilla a 80km de la capital y cuando tienen la oportunidad se escapan para disfrutarla al máximo, por la misma regla de tres, cuando viene un visitante de Almería (que está a menos de dos horas de bus de Granada) hay que sacarlo todo el día por ahí en plan jornada turística para que vea toda la ciudad. Como se suele decir cuando uno sale al campo: El paisaje muy bonito y los mosquitos muy gordos.

La parte buena de esto vino cuando llegó la noche y mi anfitrión y su colega decidieron que era el momento de sacarme de pubs, que encima el domingo era su santo. Es la primera vez que veo un San Pedro con luces de neón azules y púrpuras, además, los insecto del Darro (un río) decidieron que también había fiesta para ellos y se vinieron a estar dando el coXXzo toda la noche (hubo una vez que pensé que alguien me estaba tocando el cuello y resultó que era un bicho, imagínate). Salió una drag queen a bailar "A quién le importa" en la tarima de uno de los locales y parecía que le habían dicho "baila o muere, reina" porque se lo curró como si la vida le fuera en ello (dos actuaciones drag en dos semanas, qué me está pasando). Sobre todo moló la sensación de "todo el mundo sabe que soy de fuera" porque te miran furtivamente a ver si te das cuenta y se arriman para rozarse "accidentalmente" contigo y te escrutinan con esa mirada que puede significar tanto "yo te conozco de algo" como "quiero memorizar completamente eso que veo". Claro que también puedes hacer como el colega de mi anfitrión, que le dijo que yo era muy guapo y luego se sorprendió porque lo había oído (quizás porque estaba presente cuando lo soltó).

En fin, que en resumen, aunque me lo pasé muy bien, Granada y el campo tienen varias cosas en común: El paisaje muy bonito, los mosquitos muy pesaos y los moscones muy gordos (pero me encantó).