martes, octubre 30, 2007

La vida tal que así


Bueno, el título está en francés, pero todos sabemos qué serie es porque nos hemos criado con ella. Anda que la canción no se la sabía nadie... "Laaa vida eees asíii..."
INSPIRAR, EXPIRAR
(SIN MORIRSE)
¿En qué momento dejó mi blog de ser una reflexión personal sobre algo y pasó a ser una reflexión personal sobre mí? El egocentrismo me acecha como una sombra que intenta cubrir un tallo recién nacido en el solsticio de invierno (en caso de eso sea posible, claro). Quizás por eso me he sentido tan agobiado estos días, ciclándome en mis penas y conjeturas y escuchando las de los demás estoicamente. Encima empieza ya a hacer frío, ya puedo salir con la chaqueta de pana a la calle y no paso calor. Se acabó el verano.
¡Últimas noticias! Me informan de que las grasas del cuerpo de Sebi han sufrido un percance y están reduciendo sus efectivos de manera alarmante. Se rumorea que la vida sedentaria no ha fortalecido para nada las líneas de defensa que se habían formado la semana pasada a base de macarrones con tomate y hamburguesas con queso. ¿Acaso el cambio de clima ha hecho que tengan que dedicarse todas a mantener el cuerpo (serrano) caliente? Seguiremos informando.
Eeer... vaya, qué cosas pasan. Ya no se puede salir a la calle tranquilo (y menos con lluvia) porque adelgazas. Encima esta médula o sea todo el rato con que "me ha dicho el bícep que estoy divina de la muerte, tía", el apéndice dice que en su convenio no venían tantas horas extras, las amígdalas se han peleado con el Conde Duku y Yoda a la vez y el estógamo dice que no se llama así, que a ver si lo escribo bien ya... Menos mal que la naturaleza es sabia, que si llega a ser clorofila nos pone a todos verdes.

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