Pues otro año que se nos acaba y nosotros seguimos igual... espera, igual no, que he cambiado el trabajo y además he conseguido otro, he terminado la carrera y además con buenas notas al final, me he independizado y además en un piso que me gusta, ¡pero lo más importante es que estoy subiendo un druida feral en el WoW y además me encanta! ...No, espera, lo más importante no era eso, ¡lo más importante es que me he independizado!
3ª TEMPORADA (BUENO, EN TEORÍA)
Técnicamente, la tercera temporada empezó en cuanto terminé la carrera, pero como hace poco recordé que no lo había dejado bien claro con neones y un grabado de cohetes en el cielo pues he considerado que este sería el momento adecuado para ello: el comienzo de mi independencia.
Este año ha sido completito, no sólo en el tema profesional sino también en el tema personal, aunque es cierto que no todo ha sido bueno, supongo que porque el ser humano sólo evoluciona cuando supera adversidades (la alternativa es extinguirse según Darwin... no, el pato no, el biólogo). No obstante, el cambio más importante ha sido precisamente el poder hacer mi vida yo solito a partir de ahora, que me llena de nervios y contabilidad doméstica a todas horas, pero cuando las cuentas salen bien todas de todas supongo que no hay de qué preocuparse, para eso ya tengo a mis amigos, que parecía que eran ellos los que se iban a vivir fuera, y la verdad es que les agradezco el interés.
No hay más que ver el panorama cuando estuve buscando piso: yo vestido de camisa y formal acompañado por, según les fui asignando funciones, mi asesor legal, mi interiorista, mi guardaespaldas y mi chófer. Todo un lujo de despliegue de medios, pero la pena es que no fue posible ver el piso ese día porque la señora no me cogió el teléfono en toda la mañana, supongo que porque ver la estampa por la calle imponía*. Al menos sirvió para comprar lo necesario para la cena de esa misma noche como si se la estuviéramos preparando a Don Corleone, a lo mejor por eso la italiana de la pastelería nos enseñó tantos modelos diferentes de tarta a ver cuál nos gustaba.
En fin, que se suele decir que "el año se empieza igual que se acaba", lo cual es completamente contrario a lo de "año nuevo, vida nueva", pero en mi caso voy a coger mitad de cada, porque es cierto que voy a empezar igual que lo termino**, y porque también comienzo una nueva vida por mi cuenta en la que tendré que empezar a fijarme a cuánto está el kilo de tomates en la carnicería, qué lavavajillas me deja la ropa más limpia y si se me da bien planchar huevos o freír corbatas. Vamos, esto va a ser un no parar... cuando tenga internet en el piso.
¡Feliz año nuevo!
*Parecíamos los de CSI Inmobiliaria.
**Comiendo uvas como el 90% de España y los estados añadidos.
sábado, diciembre 31, 2011
jueves, diciembre 29, 2011
Contrastes
¡Qué frío a pesar del sol! Y yo cogiendo aceitunas en el pueblo en vez de estar en casita hibernando, si es que ya no se respetan las antiguas tradiciones: dejar que los demás lo hagan todo por mí. En fin, al menos aprendí que el Harvest Moon no es para nada ficticio (en la realidad también es un coñazo recoger la cosecha en invierno).
MARGEN DE ERROR
No podemos evitarlo: cuando estamos en público siempre mostramos un aspecto de nosotros diferente al que nos sería natural mostrar, sin embargo, siempre tenemos que pelear con esa dualidad cuando estamos con alguien que no nos condiciona socialmente, como la familia. Ese contraste es el que nos lleva al dicho "la confianza da asco", pero también es porque se suele considerar que la gente de fuera no tiene derecho a saber cómo somos en realidad, al menos no sin demostrarnos que se lo merecen, claro. También por eso solemos permitir menos errores a la gente que tenemos más cerca y nos lleva a enfadarnos más a menudo con ellos a pesar de que luego perdonamos fallos más grandes a gente se lo merece menos por no preocuparse por ellos, supongo que porque creemos que la gente que nos conoce más debería ser capaz de sortear nuestras exigencias personales con mayor facilidad que alguien que no pertenece a nuestro jardín personal.
Curiosamente, este último tipo de gente es el que menos se preocupará de hacer las cosas bien con nosotros a pesar de que son los que más margen de abuso tienen, por eso mismo se deberían invertir las tornas: darles más margen a aquellos que van a hacer mejor uso de él y no permitirles ni media a aquellos que no lo merezcan... pero entonces nadie haría amistades, claro. Hay que tener en cuenta que el concepto de amistad se mide por la cantidad e intensidad de abusos que estamos dispuestos a soportar de esa persona sólo por no dejar de hablarnos, razón por la que es importante darle un buen margen de error en caso de que las cosas no vayan como nos convendría a nosotros (pero sí a la otra persona), ahora bien, si eso se va a convertir en una costumbre no está de más plantearse los pros y los contras de esa relación en una balanza a ver si las cuentas salen a devolver.
Por ejemplo: decir que alguien que es tu mejor amigo, además de tu jefe, te obliga a trabajar en festivos nacionales a pesar de que tienes una visita en casa que se ha recorrido media península para ir a verte, pero que no has podido atender en absoluto en todo el fin de semana porque tu jefe se ha empeñado en hacerte trabajar siete días a la semana, no sólo es incongruente sino que también es de psicólogo. No obstante, cada cual elige a sus amistades y si estamos dispuestos a ponernos cilicios voluntariamente eso queda únicamente bajo nuestro criterio, ahora bien, es muy posible que el abusador no valore esa confianza en absoluto y que la visita considere que no merece ese trato, perdiendo la amistad en el proceso*. Un claro ejemplo de un mal reparto del margen de error... que se da constantemente hoy en día.
*Sobre todo cuando la visita recibe un mensaje un mes después como si nada hubiera pasado.
viernes, diciembre 23, 2011
Pizarra
Si miras con la suficiente atención verás algo muy navideño producto de una inspiración divina... y de que a los alumnos se les había olvidado que adelantábamos media hora la clase.
NAVIDADISMOS
Qué curioso que lo más típico, y lo más inevitable, de estas fechas sea lo que menos me gusta. No, no son los polvorones... no, tampoco son las peladillas... no, tampoco son los turrones... no, tampoco ¡bueno, basta ya! Que lo que yo quería decir era que no soporto los villancicos, pero que no tengo más remedio que dejarme poseer por el espíritu de Santa Teredejé y aguantar estóicamente el tirón. Como dice una que yo conozco: Señor, dame paciencia, porque como me des fuerza me los cargo a todos en fila.
Es que, realmente, ¿de qué hablan los villancicos? Vale que tienen componente religioso, lo cual es comprensible, pero me refiero a la temática en sí: uno que si al padre del niñito en cuestión los roedores le han destrozado la ropa interior, otro que los ladrones les están robando los dulces de navidad, ¡otro que incluso fomenta la bebida por ver a un niño recién nacido! En resumen: pobreza, robos y bebida... pues no entiendo por qué los colegios los permiten, aunque sí que entiendo por qué son tan populares, parece que cumplen la temática de las noticias de la tarde.
En fin, que puestos a cantar sobre cosas que no tengan sentido, he decidido que este año voy a cantar un villancico nuevo que he encontrado por internet y que me ha parecido curioso. No es que sea de temática navideña, de hecho, la letra no tiene ningún sentido en absoluto, pero me parece tan genial cuando la gente se inventa las canciones en inglés haciendo como que sabe lo que dice que tanto me da cantar yo algo que directamente no significa nada. Ahí va la letra:
- LocoRoco -
Bajumbo moi noi noi jecker
Dabatto bunkergait jun jun
Nora juerue-rotto pura-pura petto
Puraret dum dum
Papuranoi noi noi jecker
Dabatto bumperget tum tum
Ora poerketino bookeran tan-tan-so
Bokeretyo kyenturanai mimani unlalhood-cha-la
Terra hooki-ra pishi-to diki-ra poody-to
Seni-kidi koseibo
Kokorenkyo kyenturanai mimani unlalhood-cha-la
Terra hooki-ra shishi-sho tusura hajiki yo
Bajumbo moi noi noi jecker
Dabatto bumperget tum tum
Nora juerue-rotto rokorolo-petto
Pura-purarun dum dum
Papuramoi noi noi jecker
Dapatto bumperget tum tum
Ora poerketino bookeran tan-tan-so
sábado, diciembre 17, 2011
Curiosidades
Uno esperaría encontrarse eso por la zona de los polígonos industriales y demás, pero cuando uno acaba de ver una exposición sobre la ruta de la seda en un museo y la siguiente que se encuentra es la "Sala X" no puede sino asustarse. Claro que, habiendo salido de la IX no es tan sorprendente, ¿no?
FALLO TÉCNICO
El otro día se me ocurrió explicarle a uno de mis compañeros en el trabajo una técnica que utilizo yo para no tener que escribir dos veces lo mismo en la pizarra... y no era hacer que los niños lo copien, no, eso ya lo doy por hecho. Todo comenzó porque le pregunté si era posible escanear una imagen para poder utilizarla en las explicaciones de clase, a lo que él me respondió que sí, pero que tenía que ponerle el logo de la empresa y demás chupipandas que había que hacer para que todo quedase oficial y bonito, pero no era eso lo que yo quería saber exactamente. Yo soy muy dado a dibujar en clase durante las explicaciones* y muchas veces me queda un dibujo esquematizado de lo que quería explicar que se comprende fácilmente por ser muy básico, pero luego, por uno de esos destinos del universo, jamás me vuelve a salir igual o me olvido de mencionar algo la siguiente vez que intento reproducirlo, por eso se me ocurrió en una ocasión hace años echarle una foto con el móvil a la pizarra una vez hubiera terminado con todas las anotaciones que hubiera hecho para poder consultarla y así asegurarme de que no me dejaba nada en el tintero. Tras eso, la pasé por USB al ordeñador** e invertí los colores de la imagen para que el fondo negro de la pizarra y la tiza blanca intercambiaran colores dándole la impresión de ser trazos hechos con lápiz en un folio, dejando así la foto mucho más clara que la original. Una vez terminados los retoques, recorté la imagen dejando los bordes de la pizarra fuera de la parte seleccionada y la pegué en un documento de escritura para así poder utilizarla tanto en ejercicios como en explicaciones futuras sin tener que repetir el proceso entero de dibujarlo todo, bastaba con añadir los ejercicios o actividades que me interesaran en cada grupo al documento e imprimirlo las veces que me hiciera falta, que al fin y al cabo era algo hecho de mi puño y letra y no tenía que preocuparme de derechos de autor.
En fin, que lo que yo quería saber era si podía echarle una foto al documento que yo había hecho en casa, pasarlo del móvil al ordenador, del ordenador a una memoria portáil, de la memoria portátil al ordenador del trabajo, imprimirlo en el trabajo, coger el documento impreso y escanearlo para que lo pudiéramos grabar en otra memoria portátil, pasarlo de ahí al ordenador principal y así poder utilizarlo yo las veces que me hiciera falta en las clases... a lo que mi compañero me preguntó: "¿Y no es más fácil que directamente me pases el documento original por email?". Pues sí, hijo, es más fácil, pero es que todavía no había desayunado en ese momento.
*Y curiosamente, les gusta más a los grandes que a los pequeños.
**Sí, pone ordeñador. Es que mis PCs suelen ser tan viejos que el anterior era una tostadora.
domingo, diciembre 11, 2011
Loli Pop
Hoy me he levantado con ganas de dejarme de historias y contar un cuento, que hace tiempo que no cuento nada que no tenga que ver con mi historia, y para historias ya tenemos la vida, que al fin y al cabo es lo que cuenta.
LA RESPUESTA
Al principio no hubo ningún problema. "Voy a dejar unas piruletas en este jarrón de cristal, ¿puedo?", y el respondió "Son tuyas, haz lo que quieras con ellas". Las piruletas permanecieron allí durante días y él nunca volvió a reparar en ellas hasta que una tarde ella decidió ir a visitarlo a su ciudad. Tendría que coger dos trenes y hacer un total de ocho horas de viaje, "pero cualquier requisito es válido si el propósito lo merece", pensó ella justo cuando se sentó en su asiento de madrugada. Cuando llegó a la estación, él no estaba, así que ella cogió una piruleta del jarrón y se la comió. Cuando lo llamó le dijo por teléfono que la recogería enseguida, pero el tiempo pasaba y no aparecía, así que ella se sentó a esperar en uno de los bancos. Hacía frío y el viento traía breves rachas de lluvía que se colaba entre los paneles de pladur del techo, no obstante, la reconfortaba la idea de pasar el fin de semana con él porque tenía muchas ganas de verlo... pero no llegaba. Volvió a llamar por teléfono y él le dijo que se había equivocado de estación y que tardaría un poco más en llegar, por lo que ella siguió soportando el clima y las miradas de sospecha que le lanzaban los policías aun cuando no estaba haciendo nada extraño, sólo esperar. Un hora y cuarenta minutos después él apareció diciéndole que tenían que darse prisa porque no podía dejar el coche donde lo había dejado, no un beso ni un abrazo de bienvenida, así que ella cogió otra piruleta del jarrón y se la comió. Cuando llegaron a casa él le preguntó por las piruletas, por qué cogía una de vez en cuando, y ella le dijo que si realmente quería saber el motivo ella se lo diría encantada, pero él dijo que no era tan importante y que daba igual, así que ella cogió otra piruleta del jarrón y se la comió.
A la mañana siguiente él tuvo que ir a trabajar, no porque tuviera que hacerlo, sino porque su jefe, que era su mejor amigo también, le dijo que no podían perder ni un solo minuto, así que se levantaron temprano para que tuvieran tiempo de prepararse. Ella se ofreció a ir con él, a ayudarlo en lo que le hiciera falta y de paso hacer las compras para la comida que ella quería cocinar luego, pero él le dijo que no podía ir con él, que le estorbaría y que allí no podría ayudarle en nada, así que lo mejor que podía hacer era quedarse en casa sola y no hacer nada hasta que llegase. A pesar de que ella insistió, él no cedió en absoluto y volvió a resaltar la futilidad de sus intentos por ayudar, así que cuando él se fue ella cogió una piruleta del jarrón y se la comió. Pasó la mañana sola sin poder salir puesto que la única llave del piso la tenía él, así que cuando llegó no pudo sino sentir alivio al tener la posibilidad de no estar en una cárcel de algodones. Ella le preguntó si era posible que la próxima vez le dejase una llave, él le dijo que ya veríamos porque tampoco había ningún sitio a donde ir, ella cogió otra piruleta y se la comió.
Esa tarde él trabajaba también y ella se propuso ir con él bajo la premisa de que había recorrido esa distancia para estar con él, no para estar sola en su casa. Él se negó en un principio pero no tenía interés en discutir así que cedió a regañadientes, aunque a su jefe no le hizo ninguna gracia cuando apareció allí con ella. La chica demostró inmediatamente ser capaz de ayudarles fácilmente en sus tareas, pero a pesar de eso los dos decidieron que aquel no era su lugar y que lo mejor era que se fuera hasta que terminasen la jornada. Ella obedeció, pero antes cogió una piruleta del jarrón y se la comió.
Cuatro horas más tarde, cuando él acabó de trabajar, ella se las prometía felices pensando en pasar la noche con él en casa hablando y cenando a gusto y juntos, pero su jefe le dijo que no podía irse a casa todavía porque tenía que llevarlo a comprar unas cosas que le hacían falta y no iba a coger su coche*, así que ella se resignó y los acompañó igualmente. Durante el trayecto, el jefe dejó bien claro que, aunque dos días después era fiesta y nadie trabajaba, él tendría que ir a trabajar sin condiciones, cosa que a ella le sentó bastante mal puesto que contaba con ese día para estar con él, que para eso había hecho tan largo viaje. Él hizo un intento de queja sin mucho ánimo que fue rápidamente rechazado bajo la premisa de "Hay que aprovechar cada minuto posible", por lo que ella se consoló pensando en que por lo menos tendrían la noche de ese día para estar juntos, pero ese pensamiento fue fulminado bajo el imperativo del jefe "y no vayas a llegar más tarde de las 10 esta noche a mi casa que hoy tenemos que cenar con los amigos de mi pareja, que es su cumpleaños". Ella esperó una réplica por parte de él, una réplica que nunca llegó, así que cogió una piruleta del jarrón y se la comió. No obstante, le había quedado claro como la luz del día: no le iba a ser posible estar con él a solas en todo el fin de semana, así que decidió acortar su estancia lo más posible para no tener que estar pasando por ese infierno. Cuando lo dijo en voz alta el jefe sonrió satisfecho y él no dijo nada, sólo añadió "bueno, como quieras". Quedaban pocas piruletas ya.
Al día siguiente, a pesar de haber informado la noche anterior en la cena de que ese día, el último día que tenían, era para ellos dos y no querían que nadie los molestase, el teléfono de él no dejó de sonar en toda la mañana. El número era desconocido, pero ella sabía perfectamente quién era. Cuando ya por insistencia él lo cogió, ella reconoció inmediatamente ese tono soberbio y prepotente: "¿¡Por qué no me coges el teléfono!? ¡Os he estado llamando toda la mañana para que vengáis a comer!", le regañó su jefe, él le pidió perdón y le dijo que irían allí inmediatamente. Ella no salía de su asombro, no sólo por el hecho de que el jefe le estaba gritando a su mejor amigo, sino porque también se había propuesto hacerles el fin de semana imposible, suponía que para que no volviera más. Por desgracia, esa idea le parecía cada vez menos desagradable, así que cogió una de las últimas piruletas del jarrón y se la comió. En la comida nadie le dirigió la palabra en todo el día, nadie se interesó por saber nada de ella, sólo le preguntaron el nombre. El problema no era que ella no se integrase, el problema era que a ella no se le daban bien los idiomas y ellos se empeñaban en hablar en inglés para demostrar lo cultos que eran, impidiéndole así participar en la conversación. Nadie reparó en que había una persona que nadie más conocía sentada a la mesa y nadie se preocupó de saber si se lo estaba pasando bien.
Cuando volvieron a casa ella miró el jarrón: sólo quedaba una piruleta. Ella quiso recordar el día en que él le preguntó por ellas y le dijo por qué había ido cogiendo piruletas durante todo el fin de semana: cada vez que él hacía algo que la despreciaba, ella cogía una piruleta, por eso las había gastando a lo largo de esos días, así que ella le preguntó "¿Puedo coger la última piruleta?". "Son tuyas, haz lo que quieras con ellas", respondió él, así que, comiéndose la última piruleta, ella abandonó esa casa para no volver nunca más, y no se arrepintió.
Moraleja:
Al río no le molesta ir hacia el mar, así que no te quejes por ello porque irá aunque tú te empeñes en hacerlo retroceder. Tiene que ser el propio río el que cambie su curso.
*Faltaría más.
miércoles, diciembre 07, 2011
9990
Puede que sea un poco extremo, pero si queréis conseguir el logro de los 8000 puntos de sol en una sola pantalla ésta puede ser una buena manera de conseguirlo (a mí me sirvió).
CONVERSACIONES EN LA 3ª FASE
Todo empezó cuando se me ocurrió ponerles a los alumnos en clase un ejercicio de audición. Se trataba de un profesor que le preguntaba a una alumna dónde estaban las capitales de ciertos países para que así los estudiantes aprendieran tanto la ciudad como el país en inglés. El ejercicio transurrió sin incidentes bajo mi atenta mirada y los alumnos pusieron toda su concentración en anotar cada respuesta que daba la chica de la grabación, así que cuando acabó les pregunté: "¿Habéis entendido la conversación?", a lo que una de las alumnas me respondió "Bueno, hemos oído sonidos, sí". Una clase que empieza así ya promete.
Justo esa noche de viernes, cuando yo ya estaba en casa a punto de decidir que iba a dejar el WoW hasta el día siguiente por eso de que era casi medianoche y el pc se me convertía en tostadora otra vez, un amigo me mandó un mensaje diciendo que NECESITABA* tomarse algo conmigo porque quería hablar. Ante tal propuesta yo no pude hacer otra que decirle que "Ni de coña, que me voy a dormir tal que ya", pero como insistió mucho pues acepté, así que ahí me tienes oyendo su última relación y los platos rotos de la misma en ese mismo orden como si entrase en el temario de las oposiciones**. Llegamos a un punto en el que intervino una tercera persona en la historia que estaba contando y mi colega me dijo que a esa persona "No le preguntó directamente pero le preguntó", a lo que yo me imagino la práctica de esa afirmación algo similar a "Oye, si conocieras a una tal Dalila, ¿pensarías que es un zorrón?". Evidentemente, perdí el hilo de la conversación en ese momento por culpa de tener una mente tan gráfica y sin firewall.
El lunes siguiente fui a la universidad, cosa que pensaba que no tendría que volver a hacer jamás pero el destino se tiene que partir de la risa conmigo. Me intenté sentar en la parte de atrás del autobús pero estaba ocupada por dos chicas en plena conversación para todos los públicos***, así a la vez que me resignaba decidí que iba a poner la antena a falta de poder escuchar la radio. Su conversación ya estaba empezada cuando yo llegué, pero la pillé en el momento en que el una de ellas le dijo a la otra "Oye, tía, me duele la rodilla. ¿Te acuerdas que te dije que me dolía la rodilla? Pues me duele la rodilla", de lo cual puede deducir que... ejem... le dolía la rodilla. Lo que no le dolía era la lengua, porque no paró en todo el trayecto, y prueba de ello fue que conforme iba comentando lo mal que se había portado una de ellas con otro chaval porque sólo lo llamaba para pedirle favores, pero luego pasaba de él cuando quedaban para salir en grupo, no paró de hacer incisos:
-Pues sí, el Marcos se ha enfadado con la Jenny[4] porque la tía no hace más que pedirle los apuntes para no tener que ir a clase. Fíjate que el otro día le mandó un mensaje y no le respondió.
-Pues normal, tía, que esa tiene mucho morro, que cuando estamos de exámenes está encima de él todo el día[5] y luego para las moragas ni lo llama... ¡Vaya, me he dejado el libro en la casa!
-Pues ya, pero es que eso tampoco es, que él tiene que estar a las buenas y a las malas le guste o no.
-Pues no, porque si ella sólo lo llama cuando quiere pedirle algo es que es una aprovechada. Hace bien en pasar de esa... ¡Joer, me he olvidado los apuntes en la estantería!
-Pues mira, si él quiere algo de ella va a tener que fastidiarse y seguir dejándole cosas, que si no se cree que lo tiene todo ganado.
-Pues, tía, que no es así, que si él le hace un favor ella tiene que devolvérselo, y si no que no se lo pida... Oye, ¿tienes hora? Me he dejado el móvil en mi cuarto.
-Pues serán las 8:45, y de eso nada, que si un tío quiere algo que se rebaje[6], y si no que se la machaque.
-Pues si es que siempre estás con lo mismo, ¡que no se puede hacer favores pensando en que te los devuelvan!... Maldita sea, no he cogido el estuche .
...Y más o menos en ese momento llegamos a la universidad y desconecté, pero me quedó muy claro que si la chica había llegado vestida al autobús era por algún designio divino, porque la memoria no era lo suyo. Y digo yo, ya que ibas a la universidad, ¿qué ibas a hacer allí si no te habías traído nada de lo que te hacía falta? Luego somos los hombres los que no podemos hacer dos cosas a la vez.
*Textualmente.
**Por eso de que no hay quien lo soporte.
***Como ya dije en una ocasión, incluso para los que están sordos.
[4 ] Los nombres son inventados porque no los recuerdo, pero el efecto final viene a ser el mismo.
[5] Aunque por el contexto pude deducir que no literalmente.
[6] A lo cual yo pensé que un hombre para ponerse a la altura de una mujer no tiene que rebajarse, pero en fin, tampoco iba a pedirle mucho nivel intelectual a esa conversación.
lunes, diciembre 05, 2011
Palmitas
Antes de empezar se sacuden ambas manos de arriba hacia abajo tres veces mientras que en cada una de ellas pronuncias el pronombre reflexivo de la tercera persona del singular*. La mano izquierda abajo con la palma hacia arriba y la mano derecha arriba con la palma hacia abajo, las chocas con la otra persona verticalmente y adoptan posiciones contrarias hasta volver a chocarlas verticalmente. Luego das una palmada y colocas ambas manos con las palmas mirando hacia tu compañero, momento en el que chocáis las palmas derechas de frente, das otra palmada y luego chocáis las palmas izquierdas... y vuelta a empezar.
Diga lo que diga la gente, todo el mundo ha jugado a esto en algún momento, porque todos hemos tenido hermanas, primas, hijas, sobrinas o amigas**.
CONFIDENCIA POR CONFIDENCIA
-A ver, Clara, explícamelo como para que lo entienda.
-Es bastante sencillo, Cristóbal, he tomado una decisión respecto a mi pareja: ya que yo soy tan guapa y él es más bien normalito creo que podré manejarlo como a mí me venga bien. Por ejemplo, aunque él no se ha interesado nunca especialmente en tener novia debido a su falta de popularidad, el hecho de que yo le preste atención le ha despertado la necesidad de estar conmigo, y es por eso que él me ayuda siempre con las matemáticas sin esperar nada a cambio, así que cualquier gesto de cariño que yo tenga hacia él le servirá de recompensa mejor que cualquier otro pago que pudiera darle.
-¿Pero no crees que eso es aprovecharse de la gente?
-Pues en cierto modo no, es más, creo que le estoy haciendo un favor. Sin ir más lejos, tú sabes que los hombres no distinguís nunca entre novia y amiga, esa distinción no existe para vosotros, vuestra distinción es del estilo a "chicas que querría tener en mi harem" y "chicas con las que necesito alcohol primero" pero que en realidad son el máximo y el mínimo de la misma escala, ¿verdad? Pues bien, las mujeres tenemos dos escalas diferentes respecto a los hombres: "hombres que nos encanta tener cerca porque son perfectos para todo" y "hombres con los que haríamos de todo". La primera la escala va del mínimo al máximo dependiendo de lo cómodas que nos sintamos con ese hombre minimizando el grado de peligrosidad sexual que nos ofrezca y maximizando el nivel de utilidad en nuestra vida diaria, pero en la segunda sólo medimos el grado de vergüenza que nos daría hacer las cosas que nos pediría esa persona basándonos en lo que nos excite el estar con él, siendo el máximo "me da igual que nos vean".
-Ajá, o sea, que clasificáis a los hombres según os convenga.
-No, según su casta social, por así decirlo. Además, una vez que situamos a un hombre en una escala es completamente imposible cambiarlo a la otra, por lo que mi novio nunca será capaz de saltar a la segunda escala ya que está muy bien situado en lo más alto de la primera. En resumen, como yo soy una "chica diez" y todo el mundo va detrás de mí, él, que es un chico normalito como mucho, se beneficiará del reflejo de mi popularidad cuando los demás sepan que estamos juntos, mejorando así su estatus social, a pesar de que sólo estaré con él mientras me convenga.
-Vale, me parece un razonamiento muy elaborado.
-¿Verdad que sí?
-Sí, sólo encuentro un pequeño inconveniente a eso, Clara.
-¿Cuál es?
-Pues que ese tipo de razonamientos no se dicen en voz alta cuando la persona en cuestión está hablando contigo.
-Pero la sinceridad es la parte más importante de una relación, ¿verdad, cariño?
Y así funciona el mundo según la cultura americana, hijos míos.
*Se.
**O aburrimiento.
Diga lo que diga la gente, todo el mundo ha jugado a esto en algún momento, porque todos hemos tenido hermanas, primas, hijas, sobrinas o amigas**.
CONFIDENCIA POR CONFIDENCIA
-A ver, Clara, explícamelo como para que lo entienda.
-Es bastante sencillo, Cristóbal, he tomado una decisión respecto a mi pareja: ya que yo soy tan guapa y él es más bien normalito creo que podré manejarlo como a mí me venga bien. Por ejemplo, aunque él no se ha interesado nunca especialmente en tener novia debido a su falta de popularidad, el hecho de que yo le preste atención le ha despertado la necesidad de estar conmigo, y es por eso que él me ayuda siempre con las matemáticas sin esperar nada a cambio, así que cualquier gesto de cariño que yo tenga hacia él le servirá de recompensa mejor que cualquier otro pago que pudiera darle.
-¿Pero no crees que eso es aprovecharse de la gente?
-Pues en cierto modo no, es más, creo que le estoy haciendo un favor. Sin ir más lejos, tú sabes que los hombres no distinguís nunca entre novia y amiga, esa distinción no existe para vosotros, vuestra distinción es del estilo a "chicas que querría tener en mi harem" y "chicas con las que necesito alcohol primero" pero que en realidad son el máximo y el mínimo de la misma escala, ¿verdad? Pues bien, las mujeres tenemos dos escalas diferentes respecto a los hombres: "hombres que nos encanta tener cerca porque son perfectos para todo" y "hombres con los que haríamos de todo". La primera la escala va del mínimo al máximo dependiendo de lo cómodas que nos sintamos con ese hombre minimizando el grado de peligrosidad sexual que nos ofrezca y maximizando el nivel de utilidad en nuestra vida diaria, pero en la segunda sólo medimos el grado de vergüenza que nos daría hacer las cosas que nos pediría esa persona basándonos en lo que nos excite el estar con él, siendo el máximo "me da igual que nos vean".
-Ajá, o sea, que clasificáis a los hombres según os convenga.
-No, según su casta social, por así decirlo. Además, una vez que situamos a un hombre en una escala es completamente imposible cambiarlo a la otra, por lo que mi novio nunca será capaz de saltar a la segunda escala ya que está muy bien situado en lo más alto de la primera. En resumen, como yo soy una "chica diez" y todo el mundo va detrás de mí, él, que es un chico normalito como mucho, se beneficiará del reflejo de mi popularidad cuando los demás sepan que estamos juntos, mejorando así su estatus social, a pesar de que sólo estaré con él mientras me convenga.
-Vale, me parece un razonamiento muy elaborado.
-¿Verdad que sí?
-Sí, sólo encuentro un pequeño inconveniente a eso, Clara.
-¿Cuál es?
-Pues que ese tipo de razonamientos no se dicen en voz alta cuando la persona en cuestión está hablando contigo.
-Pero la sinceridad es la parte más importante de una relación, ¿verdad, cariño?
Y así funciona el mundo según la cultura americana, hijos míos.
*Se.
**O aburrimiento.
viernes, diciembre 02, 2011
In time
La verdad es que me gusta mucho el mensaje de esta película, aún cuando todavía no la he visto. Es cierto que vivimos en una sociedad muy superficial y que sólo se centra en el beneficio personal e inmediato, que deja de lado las preocupaciones ajenas como algo a evitar y que no tiene reparos en aislar los problemas propios como algo que no le concierne a nadie más, por eso me gusta el mensaje, tanto implícito como explícito, de esta película aunque venga en imperativo de usted: ¡Intime!
...Pero sinceramente creo que no me gustará la actuación del protagonista cuando la vea, todo sea dicho.
CHILDREN
Curioso, he escrito el título de este post y me he acordado de esa canción de Robert Miles de hace más de una década y que escuchaba yo en esa época en la no quería estudiarme el temario de Historia y Geografía del BUP... pues no ha llovido desde entonces*. Eiffel 65 cantaba algo parecido con la música de Battiato en el estribillo: "Me pregunto qué pasó con todos ellos, ¿dónde están las estrellas de los 80?" Vale que la música que yo he comentado antes es de los 90, pero esos son los hijos del Eurobeat de la década anterior, así que ¿dónde narices se han metido esos Rhythm is a Dancer o Piece of my Heart que tan genialmente sonaban en las discotecas?
Todo esto se me ocurría mientras iba haciendo camino en el tren hacia Linares. En las cuatro horas de viaje tuve tiempo de pensar en muchas cosas, como por ejemplo por qué no era capaz de conciliar el sueño a pesar de haber dormido menos de seis horas la noche anterior, aunque puede que se debiera a males menores... de edad. Una joven madre de estado civil indefinido se dirigía a Castellón en el mismo trayecto que yo, y puedo asegurar sin miedo a equivocarme que era madre porque se había traído a sus dos querubines con ella: un chavalín de 4 años de lo más inquieto y una señorita de 7 que tenía que llamar la atención de todo el vagón haciendo los ejercicios del colegio en voz alta. Evidentemente, todo ello indicaba que, a pesar de haberme levantado a las 6:15 y de haber dormido menos de cinco horas, no iba a poder dejarme caer en los brazos de Morfeo**.
El caso es que cuando llegamos a Linares nos informaron que el próximo tren, en el que teníamos que subirnos para continuar hasta Valencia (y ellos hasta Castellón), llegaría en unos 50 minutos, así que aprovechamos para desayunar en la que posiblemente fuera la cafetería mejor situada de la historia: estaba nada más salir del tren y sin entrar ni siquiera en la estación, vamos, que podías pedirte el café desde la ventanilla si querías***. Una vez tomé posesión del asiento que decidí que iba a ser mío durante la próxima hora, vi que la madre estaba teniendo algún que otro problemilla con tener que llevar a ambos hijos al servicio sin dejarse el equipaje sin vigilancia, así que yo me ofrecí a cuidarlo mientras ella cumplía con las necesidades biológicas de sus vástagos. Pues bien, tras eso, el chavalín no paró de llamar mi atención, a lo cual yo respondí poniéndome mi traje de profesor inmediatamente enseñándole los colores, liberando así un poco a la madre de responsabilidades para que no le diera un ataque de nervios en las cuatro horas que nos quedaban todavía de viaje. Fue un alumno muy atento y ansioso de aprender, tanto, que hasta la madre sintió la necesidad de preguntarme que si tenía hijos[4].
La verdad es que es sorprendente cómo buscamos ejemplos a seguir de pequeños. Cualquier persona puede influir en nosotros de tal manera que consideramos que queremos ser así cuando crezcamos. Eso a nivel consciente podemos deducirlo, pero cuando somos pequeños eso queda arraigado en el cerebro y se va encubriendo con todo lo que vamos aprendiendo... pero ahí estará igualmente dictándonos una orden que no sabemos de dónde viene pero que sabemos que queremos seguirla. Es por eso que creo que el trabajo de profesor, aun cuando no inventemos el generador de antimateria ni teoricemos sobre los viajes en el tiempo, es importante para el destino de mucha gente y por ello considero que es un cargo de mucha responsabilidad... que está muy mal pagado. Eso de niño ni te lo planteas, ja.
*Es cierto, no ha llovido, que os recuerdo que esto es Almería (como dijo el de 300).
**Que la saga Matrix ya acabó... tal cual empezó, según parece.
***Pero no era muy recomendable por eso del "café expresso".
[4] A lo cual yo respondí que "no, pero ya tengo todos los que quiero" ...Aunque también podría haber respondido que tenía más de 30 nuevos cada año.
...Pero sinceramente creo que no me gustará la actuación del protagonista cuando la vea, todo sea dicho.
CHILDREN
Curioso, he escrito el título de este post y me he acordado de esa canción de Robert Miles de hace más de una década y que escuchaba yo en esa época en la no quería estudiarme el temario de Historia y Geografía del BUP... pues no ha llovido desde entonces*. Eiffel 65 cantaba algo parecido con la música de Battiato en el estribillo: "Me pregunto qué pasó con todos ellos, ¿dónde están las estrellas de los 80?" Vale que la música que yo he comentado antes es de los 90, pero esos son los hijos del Eurobeat de la década anterior, así que ¿dónde narices se han metido esos Rhythm is a Dancer o Piece of my Heart que tan genialmente sonaban en las discotecas?
Todo esto se me ocurría mientras iba haciendo camino en el tren hacia Linares. En las cuatro horas de viaje tuve tiempo de pensar en muchas cosas, como por ejemplo por qué no era capaz de conciliar el sueño a pesar de haber dormido menos de seis horas la noche anterior, aunque puede que se debiera a males menores... de edad. Una joven madre de estado civil indefinido se dirigía a Castellón en el mismo trayecto que yo, y puedo asegurar sin miedo a equivocarme que era madre porque se había traído a sus dos querubines con ella: un chavalín de 4 años de lo más inquieto y una señorita de 7 que tenía que llamar la atención de todo el vagón haciendo los ejercicios del colegio en voz alta. Evidentemente, todo ello indicaba que, a pesar de haberme levantado a las 6:15 y de haber dormido menos de cinco horas, no iba a poder dejarme caer en los brazos de Morfeo**.
El caso es que cuando llegamos a Linares nos informaron que el próximo tren, en el que teníamos que subirnos para continuar hasta Valencia (y ellos hasta Castellón), llegaría en unos 50 minutos, así que aprovechamos para desayunar en la que posiblemente fuera la cafetería mejor situada de la historia: estaba nada más salir del tren y sin entrar ni siquiera en la estación, vamos, que podías pedirte el café desde la ventanilla si querías***. Una vez tomé posesión del asiento que decidí que iba a ser mío durante la próxima hora, vi que la madre estaba teniendo algún que otro problemilla con tener que llevar a ambos hijos al servicio sin dejarse el equipaje sin vigilancia, así que yo me ofrecí a cuidarlo mientras ella cumplía con las necesidades biológicas de sus vástagos. Pues bien, tras eso, el chavalín no paró de llamar mi atención, a lo cual yo respondí poniéndome mi traje de profesor inmediatamente enseñándole los colores, liberando así un poco a la madre de responsabilidades para que no le diera un ataque de nervios en las cuatro horas que nos quedaban todavía de viaje. Fue un alumno muy atento y ansioso de aprender, tanto, que hasta la madre sintió la necesidad de preguntarme que si tenía hijos[4].
La verdad es que es sorprendente cómo buscamos ejemplos a seguir de pequeños. Cualquier persona puede influir en nosotros de tal manera que consideramos que queremos ser así cuando crezcamos. Eso a nivel consciente podemos deducirlo, pero cuando somos pequeños eso queda arraigado en el cerebro y se va encubriendo con todo lo que vamos aprendiendo... pero ahí estará igualmente dictándonos una orden que no sabemos de dónde viene pero que sabemos que queremos seguirla. Es por eso que creo que el trabajo de profesor, aun cuando no inventemos el generador de antimateria ni teoricemos sobre los viajes en el tiempo, es importante para el destino de mucha gente y por ello considero que es un cargo de mucha responsabilidad... que está muy mal pagado. Eso de niño ni te lo planteas, ja.
*Es cierto, no ha llovido, que os recuerdo que esto es Almería (como dijo el de 300).
**Que la saga Matrix ya acabó... tal cual empezó, según parece.
***Pero no era muy recomendable por eso del "café expresso".
[4] A lo cual yo respondí que "no, pero ya tengo todos los que quiero" ...Aunque también podría haber respondido que tenía más de 30 nuevos cada año.
jueves, diciembre 01, 2011
Arbolitos defensores
¡El poder de la naturaleza contra... ¿¡los elementos naturales!? Pues sí, este es otro de los juegos que me han proporcionado un buen rato de diversión, aparte de mi nuevo avatar, claro. ¿Por qué me llaman tanto la atención las plantas en los juegos? ¿Estoy condenado a llevar a Bulbasaur eternamente en el Pokémon? Es que los otros no me llaman nada la atención...
EQUISMAS PRESENTS
¡Atacan las compras navideñas! ¡A las barricadas, apurad la munición de la tarjeta de crédito y no os dejéis engañar por las ofertas de última hora! ...Y todo esto mientras TODAVÍA estamos en crisis, claro, porque el mundo puede hundirse del mismo modo que el Titánic pero la gente se te enfada de por vida si no le mandas una tarjeta de felicitación o le haces un regalo en estas fechas. No podemos luchar contra las leyes de la naturaleza, por eso cada 340 días nos entra la ansiedad de buscar, adquirir, rectificar, volver a adquirir, envolver, dedicar, regalar y luego volver a la tienda con el cheque regalo que muy hábilmente nos ha regalado nuestro objetivo de agasajamiento. ¿Es ÉSTE el auténtico significado de la Navidad? Pues según Disney y demás empresas no, pero otros autores más antiguos no opinaban igual.
Dickens escribió "Cuento de Navidad", libro que yo recomiendo leer* para así no tener que volver a ver nunca más ninguna película navideña**. En ese libro un hombre rico, huraño y avaro como él sólo se negaba a dejarse llevar por el consumismo de estas fiestas aún cuando todos sus vecinos, porque amigos no tenía, le decían que había que compartir "porque es Navidad". Pues bien, él no lo hizo y el karma divino le mandó*** tres pesadillas seguidas durante una sola noche para que así, de puro pánico se alienase lo suficiente como para querer desperdiciar su fortuna en cosas no tan relevantes. ¿Qué hemos aprendido de esta historia, niños?
-Primero, que, según el libro, las personas que no compran nada en Navidad no hacen regalos y por lo tanto no tienen amigos, lo que nos lleva a que para tener amigos hay que regarlos... digo, regalarles cosas regularmente para que así se acuerden de nosotros al menos una vez al año.
-Segundo, que cuando uno tiene mucho y los demás menos el primero tiene la obligación moral de compartir todo lo que tiene con el resto del universo para que no lo vean como una mala persona. No obstante, el karma indica que si una persona tiene una vida desahogada y otros una vida más apurada es porque en sus vidas anteriores hicieron algo que les proporcionó ese destino posterior, o sea, algo muy bueno el que vive desahogado y algo muy malo el que vive apurado, lo que nos lleva a que si el que disfruta de su recompensa no la comparte con los que han actuado mal el mundo le pone la etiqueta de "tacaño", "avaro" o "malvado" mientras que lo que está siendo es consecuente, a diferencia del resto del mundo.
-Tercero, cuando alguien en sociedad se diferencia del resto, ésta tiene tendencia a señalarlo con el dedo hasta que el primero recula y se adapta para parecerse a la masa y no destacar en nada, cosa que ocurre en este libro también de la manera más sencilla posible: el viejo rico no cree en el consumismo y se niega a comprar regalos para la gente de su ciudad, pero como todos los demás habitantes sí que creen que la Navidad consiste en regalar lo intentan condicionar constantemente para crearle mala conciencia y que no pueda dormir bien por la noche. Un claro ejempo de la manipulación social a la que nos enfrentamos cada año, eso el que se enfrente, claro.
-Por último, una persona puede tener convicción de hacer o dejar de hacer algo y lo mantendrá así en la medida de lo posible, lo cual es el tema principal de muchas películas y series, pero el auténtico motor del mundo para alcanzar cualquier meta es el miedo. ¿Cómo si no iba a cambiar su manera de ser, cultivada durante toda la vida, un sexagenario? Si alguien de esa edad se niega a ponerte en su testamento sólo tienes que mandarle tres fantasmas para que lo aterroricen durante la noche y así al día siguiente no dudará en derrochar su fortuna sin pensar en las consecuencias... aunque creo que actualmente lo declararían como "incapacitado" y el banco se quedaría todo su dinero.
Todo esto nos da como resumen que la Navidad es, según lo que la televisión pretende hacernos creer hoy en día, una época para compartir y gastarse dinero en los demás, pero que sepáis que alguien en su momento escribió un libro que ya denunciaba el consumismo obligado socialmente que reina en estas fechas. Total, el auténtico significado de la Navidad no es ése tampoco, sino que es ni más ni menos que la capacidad de hacerle el vacío a la persona más importante del momento: se trata de celebrar el cumpleaños de una persona que, curiosamente, es la única que jamás recibirá regalos en su propia fiesta mientras todos los demás se lo pasan bien.
*O, en su defecto, ver "Los Fantasmas Atacan al Jefe".
**Las resume todas, más que nada porque todas están sacadas de ahí.
***O manduvo (sí, pienso imponer este término como filólogo que soy).
martes, noviembre 29, 2011
Nueva adquisición
...Que nunca, y la verdad es que si a mí me hubieran dividido en diez seres exactamente igual que yo pero con la décima parte de mi tamaño original sí que me darían los catorce ataques (y probablemente a los de mi alrededor también, pero antes).
DISCUSIÓN CONYUGAL
Era evidente que iban a discutir, él lo supo desde que entró en la habitación, pero no tenía ni idea de que iba a ser algo tan relevante como para provocar la ruptura de los dos. Se había escudado en un manto de inconsciencia durante demasiado tiempo para no tener que distinguir lo correcto de lo incorrecto. Ella no podía soportarlo más, le quemaba por dentro desde hacía mucho tiempo y no se creía capaz de resistirlo por más tiempo, tenía que soltarlo cuanto antes o acabaría explotando. Tomó fuerzas mientras se cepillaba el pelo delante del tocador y se giró rápidamente sujetando el cepillo con la mano derecha pero sin darse cuenta de la fuerza con la que lo apretaba. Se iba a atrever a confesar lo que sentía respecto a su marido, aunque sería más un pensamiento en voz alta que una confesión.
-No lo aguanto más*.
-¿El qué, cariño?
-¿El qué? ¡Pues esa afición tuya que tienes, estás obsesionado!
-...No creo estar tan obsesionado.
-¡Sí qué lo estás! ¡No paras de repetirlo constantemente! "Soy un transformer, soy un transformer...".
-...Pero, cariño, puedo cambiar.
-¿¡Ves!? ¡Ya estás otra vez!
Bien, antes de que me apedreéis por este chistazo os tengo que decir, en mayor detrimento mío y de mi sentido del humor, que estuve sin poder reaccionar durante quince minutos de la risa cuando lo leí (creí que iba a morir asfixiado, vaya). Ya sabéis, mis chistes son como las anécdotas médicas: cuando las cuenta uno mismo son tremendas, pero cuando las cuenta otro te dan ganas de que te trague la tierra. Alfredo lo sabe bien.
*Otra manera de decirlo es "me tienes hasta..." o simplemente "tenemos que hablar".
miércoles, noviembre 23, 2011
Haribo
La verdad es que me sentí como Ralph Wiggum cuando vi este anuncio y pensé "¡Gominolas asesinas!", lo que demuestra que no existen las personas tontas sino las poco comprendidas.
Esto me trae a la memoria una reflexión que le planteé a una profesora cuando estaba en Irlanda: ¿Una persona que plantea ideas que nadie más comprende es una persona muy inteligente o simplemente dice tonterías? Más aún, ¿una persona que le cae bien a todo el mundo es una persona agradable o simplemente manipuladora? (¿Qué tendrán esos zumos de desayuno que me tomo por las mañanas?).
MAYCA DE LOS BOSQUES
Un buen día de verano, mi amiga Mayca decidió irse con su cariñito de caravaneo por los cerros de Úbeda... bueno, de Úbeda no, pero de los Pirineos en dirección a Francia sí, que también hay que echarle ganas, pero se dejó seducir por la idea de estar en plena naturaleza y de presenciar un paisaje único, así que con tan prometedora idea se embarcaron en su periplo con dirección a la República vecina*. Una vez recorrida la península enterita de una punta a la otra, literalmente, se encontraron con el primer inconveniente: el camino ya no seguía hacia adelante, seguía hacia arriba, pero tal nimiedad no iba a echarlos atrás después de haber recorrido tanto camino, así que armados con grandes cantidades de valor, entusiasmo y Biodramina reemprendieron la marcha sin detenerse hasta la noche. Cuando, tras un largo rato buscando sin éxito, abandonaron la idea de aparcar en un parador o área de descanso, encontraron un sitio donde parecía que podrían quedarse sin estorbar a los posibles viajeros que utilizasen esa... ¿carretera?** y en el que podrían disfrutar de un maravilloso amanecer en plena naturaleza, así que decidieron que pasarían la noche allí.
Ya con los pijamas puestos y con predisposición a dejar pasar el manto crepuscular hasta el día siguiente, estaba mia amiga haciendo una cena ligera para ellos dos cuando de repente un repentino seismo sacudió la caravana y los puso en alerta. Bien es sabido por todos (los que lo sepan) que durante la época del plegamiento alpino*** los Pirineos era una zona conflictiva, pero el caso es que tropecientos mil años después no deberían serlo tanto, más que nada por eso de que uno teme por su vida cuando la caravana en la que se encuentra empieza a balancearse como el barco vikingo de la feria, así que se temieron lo peor. No obstante, cuando cesó el movimiento y pudieron ponerse de pie otra vez, decidieron subir las cortinillas para ver si la caravana tenía algún desperfecto y fue entonces cuando pasaron por un momento de auténtico terror: un ojo del tamaño de una manzana, y su cabeza correspondiente, los saludaron sorprendidos pegados al cristal a la voz de "¡MUUU!".
Efectivamente: un rebaño infinito de vacas los había visto desde lejos con las luces y los había confundido con una de ellas, por lo que se habían acercado a la nueva para incorporarla como buen grupo de rumiantes que son. La primera reacción que tuvieron ambos fue arracar la caravana y salir de allí, no fuera que las vacas se asustasen durante la noche y la volcasen, así que tomaron asientos de conductor y co-piloto, se abrocharon los cinturones y arrancaron con la firme convicción de seguir buscando un poco más esa área de descanso que tanto añoraban en esos momentos... para ver que estaban COMPLETAMENTE rodeados de vacas y era totalmente imposible moverse sin atropellar ninguna. Como eso hubiera tenido terribles consecuencias[4], hicieron de tripas corazón de la luz oscuridad para que la noche transcurriera sin incidentes lo más rápido posible. A la mañana siguiente no hubo más recuerdo del terrorífico rebaño que la evidente aportación de cada una de ellas al enriquecimiento de los nutrientes del suelo y pudieron continuar su periplo pirenaico... porque eso no fue más que su primer contacto con la naturaleza autóctona.
Cuando llegaron a Francia ambos se maravillaron con el verdor predominante por aquellos lares. A ambos lados de la carretera había grandes extensiones de árboles en plena exuberancia, en parte debido al excelente tiempo de que estaban disfrutando nuestros protagonistas durante todo el viaje, así que decidieron que era un buen momento para hacer un alto en el camino y deleitarse un poco con la zona. En un área de descanso cercana encontraron un rinconcito encantador con mesas, papeleras, agua potable, baños, duchas, servicio de lavandería, guardería y televisión por cable, que si bien podría resultar un poco austero en un principio, todo el mundo dabe que cuando uno está en plena naturaleza tiene que apañarse sin todas las comodidades que ofrece la vida urbana. Mayca decidió salir a dar una vuelta y explorar la zona que tan agradablemente había despertado su interés y así lo hizo: recogió florecitas silvestres, iba dando saltitos y sonriendo a todos los animalitos que encontraba por el camino, y cuando iba a llegar a la segunda estrofa del "¿eres tú mi príncipe azul?" vio un animalito de lo más curioso en medio del sendero. Era una Eutanias Sibiricus, o al menos eso pensó ella mientras observaba a la ardilla que le devolvía la mirada expectante ante tan curiosa invitada. Mayca, lejos de intentar cantar y bailar con ella, como sugeriría la empresa Disney, decidió verla correr hacia el árbol más cercano y subirse en él de un salto. Trepó por sus ramas por encima de Mayca mientras ésta se erguía para poder observarla mejor encantada por la simplicidad y simpatía de tan gracioso animal... al menos hasta que la susodicha ardilla empezó a sacudir las ramas y le empezaron a caer bellotas a discreción como si de una lapidación se tratase. Tras los primeros treinta bellotazos en menos de cinco segundos, Mayca decidió dejar de deleitarse con la naturaleza y volver a la seguridad de la zona de descanso no fuera que la naturaleza decidiera deleitarse con ella un poco más fuerte.
Y así continuaron su viaje sin más incidentes, al menos por el momento.
Tal y como lo he contado, puede parecer que mi amiga no es una persona muy natural, pero en realidad es todo lo contrario: Mayca se lleva estupendamente con los animales[5], no hay más que ver lo que le pasó en una ocasión que fue a sacar a su perro.
Mayca tiene un perro que es más grande que todos nosotros juntos, pero es muy cariñoso y siempre quiere jugar, por eso conviene sacarlo a menudo para que haga algo de ejercicio. Una noche, antes de cenar, decidió ir a dar una vuelta con él para no tener que ir luego antes de acostarse y tanto ama como perro se encontraron al salir a un pequeño intruso en el portal de su casa que los miraba moviendo los bigotes: un ratoncito que se había colado por un hueco de la puerta. Cierto es que hoy en día no es tan fácil ponerse de acuerdo ni siquiera en las familias más reducidas, por lo que siempre hay división de opiniones respecto a todo, cosa que pasó cuando dueña y mascota se miraron mutuamente con el ratoncito en mente: él pensó "¡Vamos a jugar a cogerlo!" y ella pensó "¿He hecho testamento?".
Acto seguido ocurrió lo que podría calificarse como "el posible nuevo baile del verano", por lo que tendremos que explicar los pasos a seguir para llevarlo a cabo correctamente: primero, el perro corre en dirección roedora y el ratón se le cuela por debajo de las patas en dirección contraria; segundo, el perro decide seguir persiguiéndolo pasando por debajo de las "patas" de su dueña, a lo que ésta decide levantar una de ellas en plan gimnasta para que el perro pueda pasar sin arrollarla pero la correa tira de ella y tiene que pasar el brazo por debajo de la ingle, y a todo esto el ratón se vuelve a escabullir del perro colocándose justo al lado de Mayca; tercero, el perro, lejos de repetir el mismo camino que antes para que su dueña pueda recuperar la compostura (o simplemente la postura), decide seguir al ratón por el lado contrario al que antes había ido, a lo que el pequeño roedor se asusta y opta por trepar por las piernas de Maica hasta subirse en su espalda, y todo esto sin que ella se dejase llevar por el pánico[6]; cuarto, el perro da una vuelta buscando al ratón, la dueña gira encorvada con la mano de la correa pasada por debajo de las piernas para no ser derribada por los tirones de correa de su perro desde su espalda, y el ratón, que ya vió su salida, da un salto hasta la puerta con la firme intención de dejar esta etapa de su vida atrás para siempre; el paso final fue que el perro saltó también hacia la puerta para intentar atraparlo, Mayca levantó la pierna para que el perro pasase otra vez, pudiendo a la vez recuperar la postura normal erguida, y el ratón se escapó al más puro estilo de los dibujos animados que todo el mundo conoce. Tras el bailecito Mayca juntó los talones, levantó los brazos y los jueces le dieron un 7.8 de media. No es una mala nota pero podría mejorarse si hubiera bailado el pino con las orejas mientras cantaba "Ave María (purísima)" de Bisbal con acento catalán en el tercer paso, espero que le salga mejor la próxima vez... y menos mal que no la vió nadie, todo sea dicho.
Como véis, mi amiga se lleva estupendamente con la naturaleza, es sólo que de vez en cuando conviene descansar de tanto deleite no sea que nos empachemos.
*Ups, nada de política.
**El hecho de no haber visto una señal de tráfico desde hacía cuatro horas no los desanimó, a pesar de que muchas películas de terror americanas empiezan así, ja.
***Que no tiene nada que ver con guardar doblados los lápices de colores en la caja.
[4] Como tener que pagarle al granjero de turno la vaca.
[5] Yo en cambio sólo me llevo bien con los animales cuando están lejos o en vitrinas de cristal.
[6] Tampoco tuvo tiempo, todo sea dicho.
Esto me trae a la memoria una reflexión que le planteé a una profesora cuando estaba en Irlanda: ¿Una persona que plantea ideas que nadie más comprende es una persona muy inteligente o simplemente dice tonterías? Más aún, ¿una persona que le cae bien a todo el mundo es una persona agradable o simplemente manipuladora? (¿Qué tendrán esos zumos de desayuno que me tomo por las mañanas?).
MAYCA DE LOS BOSQUES
Un buen día de verano, mi amiga Mayca decidió irse con su cariñito de caravaneo por los cerros de Úbeda... bueno, de Úbeda no, pero de los Pirineos en dirección a Francia sí, que también hay que echarle ganas, pero se dejó seducir por la idea de estar en plena naturaleza y de presenciar un paisaje único, así que con tan prometedora idea se embarcaron en su periplo con dirección a la República vecina*. Una vez recorrida la península enterita de una punta a la otra, literalmente, se encontraron con el primer inconveniente: el camino ya no seguía hacia adelante, seguía hacia arriba, pero tal nimiedad no iba a echarlos atrás después de haber recorrido tanto camino, así que armados con grandes cantidades de valor, entusiasmo y Biodramina reemprendieron la marcha sin detenerse hasta la noche. Cuando, tras un largo rato buscando sin éxito, abandonaron la idea de aparcar en un parador o área de descanso, encontraron un sitio donde parecía que podrían quedarse sin estorbar a los posibles viajeros que utilizasen esa... ¿carretera?** y en el que podrían disfrutar de un maravilloso amanecer en plena naturaleza, así que decidieron que pasarían la noche allí.
Ya con los pijamas puestos y con predisposición a dejar pasar el manto crepuscular hasta el día siguiente, estaba mia amiga haciendo una cena ligera para ellos dos cuando de repente un repentino seismo sacudió la caravana y los puso en alerta. Bien es sabido por todos (los que lo sepan) que durante la época del plegamiento alpino*** los Pirineos era una zona conflictiva, pero el caso es que tropecientos mil años después no deberían serlo tanto, más que nada por eso de que uno teme por su vida cuando la caravana en la que se encuentra empieza a balancearse como el barco vikingo de la feria, así que se temieron lo peor. No obstante, cuando cesó el movimiento y pudieron ponerse de pie otra vez, decidieron subir las cortinillas para ver si la caravana tenía algún desperfecto y fue entonces cuando pasaron por un momento de auténtico terror: un ojo del tamaño de una manzana, y su cabeza correspondiente, los saludaron sorprendidos pegados al cristal a la voz de "¡MUUU!".
Efectivamente: un rebaño infinito de vacas los había visto desde lejos con las luces y los había confundido con una de ellas, por lo que se habían acercado a la nueva para incorporarla como buen grupo de rumiantes que son. La primera reacción que tuvieron ambos fue arracar la caravana y salir de allí, no fuera que las vacas se asustasen durante la noche y la volcasen, así que tomaron asientos de conductor y co-piloto, se abrocharon los cinturones y arrancaron con la firme convicción de seguir buscando un poco más esa área de descanso que tanto añoraban en esos momentos... para ver que estaban COMPLETAMENTE rodeados de vacas y era totalmente imposible moverse sin atropellar ninguna. Como eso hubiera tenido terribles consecuencias[4], hicieron de tripas corazón de la luz oscuridad para que la noche transcurriera sin incidentes lo más rápido posible. A la mañana siguiente no hubo más recuerdo del terrorífico rebaño que la evidente aportación de cada una de ellas al enriquecimiento de los nutrientes del suelo y pudieron continuar su periplo pirenaico... porque eso no fue más que su primer contacto con la naturaleza autóctona.
Cuando llegaron a Francia ambos se maravillaron con el verdor predominante por aquellos lares. A ambos lados de la carretera había grandes extensiones de árboles en plena exuberancia, en parte debido al excelente tiempo de que estaban disfrutando nuestros protagonistas durante todo el viaje, así que decidieron que era un buen momento para hacer un alto en el camino y deleitarse un poco con la zona. En un área de descanso cercana encontraron un rinconcito encantador con mesas, papeleras, agua potable, baños, duchas, servicio de lavandería, guardería y televisión por cable, que si bien podría resultar un poco austero en un principio, todo el mundo dabe que cuando uno está en plena naturaleza tiene que apañarse sin todas las comodidades que ofrece la vida urbana. Mayca decidió salir a dar una vuelta y explorar la zona que tan agradablemente había despertado su interés y así lo hizo: recogió florecitas silvestres, iba dando saltitos y sonriendo a todos los animalitos que encontraba por el camino, y cuando iba a llegar a la segunda estrofa del "¿eres tú mi príncipe azul?" vio un animalito de lo más curioso en medio del sendero. Era una Eutanias Sibiricus, o al menos eso pensó ella mientras observaba a la ardilla que le devolvía la mirada expectante ante tan curiosa invitada. Mayca, lejos de intentar cantar y bailar con ella, como sugeriría la empresa Disney, decidió verla correr hacia el árbol más cercano y subirse en él de un salto. Trepó por sus ramas por encima de Mayca mientras ésta se erguía para poder observarla mejor encantada por la simplicidad y simpatía de tan gracioso animal... al menos hasta que la susodicha ardilla empezó a sacudir las ramas y le empezaron a caer bellotas a discreción como si de una lapidación se tratase. Tras los primeros treinta bellotazos en menos de cinco segundos, Mayca decidió dejar de deleitarse con la naturaleza y volver a la seguridad de la zona de descanso no fuera que la naturaleza decidiera deleitarse con ella un poco más fuerte.
Y así continuaron su viaje sin más incidentes, al menos por el momento.
Tal y como lo he contado, puede parecer que mi amiga no es una persona muy natural, pero en realidad es todo lo contrario: Mayca se lleva estupendamente con los animales[5], no hay más que ver lo que le pasó en una ocasión que fue a sacar a su perro.
Mayca tiene un perro que es más grande que todos nosotros juntos, pero es muy cariñoso y siempre quiere jugar, por eso conviene sacarlo a menudo para que haga algo de ejercicio. Una noche, antes de cenar, decidió ir a dar una vuelta con él para no tener que ir luego antes de acostarse y tanto ama como perro se encontraron al salir a un pequeño intruso en el portal de su casa que los miraba moviendo los bigotes: un ratoncito que se había colado por un hueco de la puerta. Cierto es que hoy en día no es tan fácil ponerse de acuerdo ni siquiera en las familias más reducidas, por lo que siempre hay división de opiniones respecto a todo, cosa que pasó cuando dueña y mascota se miraron mutuamente con el ratoncito en mente: él pensó "¡Vamos a jugar a cogerlo!" y ella pensó "¿He hecho testamento?".
Acto seguido ocurrió lo que podría calificarse como "el posible nuevo baile del verano", por lo que tendremos que explicar los pasos a seguir para llevarlo a cabo correctamente: primero, el perro corre en dirección roedora y el ratón se le cuela por debajo de las patas en dirección contraria; segundo, el perro decide seguir persiguiéndolo pasando por debajo de las "patas" de su dueña, a lo que ésta decide levantar una de ellas en plan gimnasta para que el perro pueda pasar sin arrollarla pero la correa tira de ella y tiene que pasar el brazo por debajo de la ingle, y a todo esto el ratón se vuelve a escabullir del perro colocándose justo al lado de Mayca; tercero, el perro, lejos de repetir el mismo camino que antes para que su dueña pueda recuperar la compostura (o simplemente la postura), decide seguir al ratón por el lado contrario al que antes había ido, a lo que el pequeño roedor se asusta y opta por trepar por las piernas de Maica hasta subirse en su espalda, y todo esto sin que ella se dejase llevar por el pánico[6]; cuarto, el perro da una vuelta buscando al ratón, la dueña gira encorvada con la mano de la correa pasada por debajo de las piernas para no ser derribada por los tirones de correa de su perro desde su espalda, y el ratón, que ya vió su salida, da un salto hasta la puerta con la firme intención de dejar esta etapa de su vida atrás para siempre; el paso final fue que el perro saltó también hacia la puerta para intentar atraparlo, Mayca levantó la pierna para que el perro pasase otra vez, pudiendo a la vez recuperar la postura normal erguida, y el ratón se escapó al más puro estilo de los dibujos animados que todo el mundo conoce. Tras el bailecito Mayca juntó los talones, levantó los brazos y los jueces le dieron un 7.8 de media. No es una mala nota pero podría mejorarse si hubiera bailado el pino con las orejas mientras cantaba "Ave María (purísima)" de Bisbal con acento catalán en el tercer paso, espero que le salga mejor la próxima vez... y menos mal que no la vió nadie, todo sea dicho.
Como véis, mi amiga se lleva estupendamente con la naturaleza, es sólo que de vez en cuando conviene descansar de tanto deleite no sea que nos empachemos.
*Ups, nada de política.
**El hecho de no haber visto una señal de tráfico desde hacía cuatro horas no los desanimó, a pesar de que muchas películas de terror americanas empiezan así, ja.
***Que no tiene nada que ver con guardar doblados los lápices de colores en la caja.
[4] Como tener que pagarle al granjero de turno la vaca.
[5] Yo en cambio sólo me llevo bien con los animales cuando están lejos o en vitrinas de cristal.
[6] Tampoco tuvo tiempo, todo sea dicho.
sábado, noviembre 19, 2011
Zen graden
Bueno, este es mi jardín zen de setas y champiñones. Como podéis ver, hay una gran variedad de ellas en sus más comunes estados de la naturaleza: abajo a la derecha está la setita, adoradora del dios egipcio Seth; abajo a la izquierda está la seta nuclear, famosa por ser siempre el centro de todo; arriba a la derecha está la seta alucinante, que sufre sus propias alucinaciones según parece; por el centro a la izquierda está la seta Cibeles, muy conocida por seguir las dietas a rajatabla; y en todo el medio del jardín, en un azul gélido monísimo, está la más común de las setas hoy en día, la seta congelada, que se suele encontrar en los supermercados principalmente. No hay nada como los juegos flash para aprender micología.
PODERES MUTANTES
Contrariamente a lo que cualquiera podría pensar, el hecho de tener más tiempo libre por las mañanas me ha hecho que en realidad tenga menos tiempo para hacer lo que yo quiera debido a clases particulares, clases de amigos y toda clase de recados que impliquen ir de una punta de la ciudad a la otra. Menos mal que para paliar los nocivos efectos de dichos contratiempos... ejem, que para que no me fastidien mucho, digo, el profesor Carlos Javier ha ofertado unos cursos de poderes mutantes útiles en la vida diaria tanto laboral como privada, lo que ya no sé es qué narices le importará a él mi vida privada, pero al menos le echaré un ojo:
-Curso de invisibilidad en la oscuridad.
¡Lo nunca visto! En este curso aprenderemos a mimetizarnos perfectamente con el entorno para pasar completamente desapercibidos en la total ausencia de luz. Se recomienda llevar gafas de cristales ahumados homologadas para evitar posibles daños en la vista dada la fuerte intensidad de la oscuridad que se utilizará durante las primeras etapas del aprendizaje, siempre teniendo en cuenta que la utilización incorrecta o no utilización de dichas gafas puede provocar que no funcione dicha invisibilidad. Útil sobre todo para cuando uno sale por locales poco iluminados y no quiere que lo vean.
-Curso de visión de rayos X a través de objetos transparentes.
¡Ver para creer! ¿Nunca se ha preguntado qué hay detrás de los envoltorios de plástico trasnparente de los supermecados o si efectivamente será una pechuga ese envasado que hay en el frigorífico? ¡Con este curso será usted capaz de eliminar todas esas dudas al desarrollar la increíble capacidad de ver lo que todos los demás también ven! Patrocinado por el Capitán Obvio. Para los que consigan pasar el curso se ofertará una entrevista personal con él en la sala de entrevistas de cristal blindado, si podéis verlo, claro.
-Curso de gravitación hacia abajo en suelo terrestre.
¡Esto sí que cae por su propio peso! Aprenda a controlar su masa de manera innata para gravitar hacia el suelo que esté pisando en ese momento siguiendo este sencillo curso de tan sólo 100 lecciones de 3 horas cada una. Aplicable tanto a suelos naturales como a suelos artificiales, por lo que podrá hacer uso de esta habilidad tanto en su entorno laboral como de ocio. En la entrega de diplomas, como cada año, se hará una demostración gratuíta de la última promoción de este curso desde un rascacielos. ¡Una oportunidad única de verdad!
-Curso de telepatía femenina.
¿Te falla la intuición femenina? ¿Nunca sabes lo que las mujeres de tu entorno quieren de ti? Con este curso aprenderás a leer sus pensamientos de la manera más fácil y eficaz. ¡Nunca más volverás a sufrir intentando entender el "tráeme eso de ahí" o el "haz lo que quieras"! A partir de ahora los mensajes en clave serán una nimiedad para ti. Sólo disponible para personas con ambos cromosomas de género idénticos.
-Curso de paciencia infinita en el entorno laboral.
¿Tienes una compañera de trabajo que practica contigo el contacto manual de gónadas? ¿Se considera superior a ti sólo porque acabas de entrar en la empresa? ¿Abusa de tu buena voluntad y se aprovecha de la desigualdad de género cuando le conviene? ¡No sufra más! Con este curso aprenderá a lidiar con todo tipo de vulpes vulpes hembra, entre ellas esa con la que trabaja. Siguiendo el sencillo método de diálogo y comprensión todo se solucionará de la manera más rápida y cómoda para usted: diálogo ("las quejas al jefe") + comprensión ("eso no es mi problema") = ¡Un trabajo mejor!
...Y este último sí que es un superpoder, pero parece que lo he desarrollado de manera espontánea. Veremos la aplicación del mismo la próxima semana.
PODERES MUTANTES
Contrariamente a lo que cualquiera podría pensar, el hecho de tener más tiempo libre por las mañanas me ha hecho que en realidad tenga menos tiempo para hacer lo que yo quiera debido a clases particulares, clases de amigos y toda clase de recados que impliquen ir de una punta de la ciudad a la otra. Menos mal que para paliar los nocivos efectos de dichos contratiempos... ejem, que para que no me fastidien mucho, digo, el profesor Carlos Javier ha ofertado unos cursos de poderes mutantes útiles en la vida diaria tanto laboral como privada, lo que ya no sé es qué narices le importará a él mi vida privada, pero al menos le echaré un ojo:
-Curso de invisibilidad en la oscuridad.
¡Lo nunca visto! En este curso aprenderemos a mimetizarnos perfectamente con el entorno para pasar completamente desapercibidos en la total ausencia de luz. Se recomienda llevar gafas de cristales ahumados homologadas para evitar posibles daños en la vista dada la fuerte intensidad de la oscuridad que se utilizará durante las primeras etapas del aprendizaje, siempre teniendo en cuenta que la utilización incorrecta o no utilización de dichas gafas puede provocar que no funcione dicha invisibilidad. Útil sobre todo para cuando uno sale por locales poco iluminados y no quiere que lo vean.
-Curso de visión de rayos X a través de objetos transparentes.
¡Ver para creer! ¿Nunca se ha preguntado qué hay detrás de los envoltorios de plástico trasnparente de los supermecados o si efectivamente será una pechuga ese envasado que hay en el frigorífico? ¡Con este curso será usted capaz de eliminar todas esas dudas al desarrollar la increíble capacidad de ver lo que todos los demás también ven! Patrocinado por el Capitán Obvio. Para los que consigan pasar el curso se ofertará una entrevista personal con él en la sala de entrevistas de cristal blindado, si podéis verlo, claro.
-Curso de gravitación hacia abajo en suelo terrestre.
¡Esto sí que cae por su propio peso! Aprenda a controlar su masa de manera innata para gravitar hacia el suelo que esté pisando en ese momento siguiendo este sencillo curso de tan sólo 100 lecciones de 3 horas cada una. Aplicable tanto a suelos naturales como a suelos artificiales, por lo que podrá hacer uso de esta habilidad tanto en su entorno laboral como de ocio. En la entrega de diplomas, como cada año, se hará una demostración gratuíta de la última promoción de este curso desde un rascacielos. ¡Una oportunidad única de verdad!
-Curso de telepatía femenina.
¿Te falla la intuición femenina? ¿Nunca sabes lo que las mujeres de tu entorno quieren de ti? Con este curso aprenderás a leer sus pensamientos de la manera más fácil y eficaz. ¡Nunca más volverás a sufrir intentando entender el "tráeme eso de ahí" o el "haz lo que quieras"! A partir de ahora los mensajes en clave serán una nimiedad para ti. Sólo disponible para personas con ambos cromosomas de género idénticos.
-Curso de paciencia infinita en el entorno laboral.
¿Tienes una compañera de trabajo que practica contigo el contacto manual de gónadas? ¿Se considera superior a ti sólo porque acabas de entrar en la empresa? ¿Abusa de tu buena voluntad y se aprovecha de la desigualdad de género cuando le conviene? ¡No sufra más! Con este curso aprenderá a lidiar con todo tipo de vulpes vulpes hembra, entre ellas esa con la que trabaja. Siguiendo el sencillo método de diálogo y comprensión todo se solucionará de la manera más rápida y cómoda para usted: diálogo ("las quejas al jefe") + comprensión ("eso no es mi problema") = ¡Un trabajo mejor!
...Y este último sí que es un superpoder, pero parece que lo he desarrollado de manera espontánea. Veremos la aplicación del mismo la próxima semana.
jueves, noviembre 17, 2011
Mission Complete!
Bueno, con la emoción de haber terminado y no tener que ir a la universidad se me había olvidado comentarlo, pero ahora que ya tengo mi título y que tengo trabajo... ah, ¿que ya lo había dicho antes? Bueno, es que hace tanto que no escribo... En fin, que se puede considerar cerrada de una vez la segunda temporada de este blog porque ahora no me quedará más remedio que dejar de contar anécdotas universitarias, más que nada porque ya no me será posible vivirlas, al menos directamente. La parte buena es que, al igual que la primera, ha sido un viaje interesante con unos compañeros... de lo más interesante también, valga la rebuznancia.
HISTORIA DE UNA IDA Y OTRA QUE NO ESTABA TAN IDA
La verdad es que no se puede decir que me haya aburrido en esta segunda temporada, aunque tampoco ha sido todo bueno en absoluto. En este tiempo he tenido de todo también, desde presentarme a oposiciones hasta acusaciones de plagio sin justificación ninguna, y todo he tenido la oportunidad de poder contarlo aquí para que mis compañeros de viaje me den su opinión*, aunque puedo decir sin miedo que lo que realmente me impulsaba a plasmar mis impresiones de forma escrita era el poder contarlo más adelante hasta la saciedad y la nausea, que me repito más que el ajo. Seguro que al leer esto estáis recordando todas esas veces que me contáis algo y yo espero pacientemente a que acabéis para empezar diciendo "ah, sí, a mí una vez...". No me lo tengáis en cuenta, soy humano, al menos de cintura para arriba**.
También ha habido cosas buenas, como la boda de unos amigos de toda la vida o algún que otro viaje que me ha hecho recordar que el tiempo pasa pero las hermanas quedan, que por cierto es el título de uno de los libros que leí este año. Esa es otra: este año he leído un montón en comparación con los anteriores, no por cantidad, que también, sino por concentración de lecturas en poco espacio de tiempo, pero es que la culpa fue mía al elegirme asignaturas de literatura y crítica literaria, aunque fuera "voluntariamente", claro. No se puede decir que haya estado realmente interesado en la mayoría de los temas que en ellas se trataba, pero al menos he descubierto que puedo ser crítico literario dando tan sólo mi opinión y que para justificarla sólo necesito decir que "en tal libro dice lo mismo que digo yo", lo cual no desprestigia en absoluto a los críticos actuales, sólo les facilita el trabajo, aunque si a mí me pagasen por dar mi opinión sobre libros dando referencias tened por seguro me apuntaba el primero donde fuera.
En fin, que mi situación actual ha cambiado, si bien no sustancialmente, sí de calidad de tiempo libre y de espacio vital. No hay más que fijarse en la cantidad de tiempo que le dedico al World of Warcraft últimamente en comparación al año anterior, que ni siquiera jugaba por falta de tiempo (y pelas). Ni que decir tiene que a partir de ahora se impone un cambio, porque es hora de renovarse o morir, así que iré haciendo como los gusanitos esos del Pokémon cuando quieren evolucionar, o sea, hacer el capullo, para poder mostraros el resultado más adelante. La verdad es que me siento como el protagonista de "Cadena Perpetua" cuando... bueno, cuando le pasa una cosa al final de la peli que no puedo contar porque... porque no es muy importante en absoluto para la trama y no tiene ninguna relevancia con el desenlace, pero que se siente desorientado sin saber qué hacer. Así me siento yo, poniendo el culo en una silla más o menos, pero con ganas renovadas de seguir pulsando teclas siguiendo el método de la escritura creativa y cantando lo mismo que Concha Velasco: Emocionada, agradecida, solamente quiero decir "¡Gracias por venir!".
...Y tendréis suerte si no llueve mañana.
*O al menos me la digan cuando me encuentran por la calle, que siempre es más directo.
**¿Demasiado picante? Bueno, es el cierre de la segunda temporada, me lo puedo permitir.
HISTORIA DE UNA IDA Y OTRA QUE NO ESTABA TAN IDA
La verdad es que no se puede decir que me haya aburrido en esta segunda temporada, aunque tampoco ha sido todo bueno en absoluto. En este tiempo he tenido de todo también, desde presentarme a oposiciones hasta acusaciones de plagio sin justificación ninguna, y todo he tenido la oportunidad de poder contarlo aquí para que mis compañeros de viaje me den su opinión*, aunque puedo decir sin miedo que lo que realmente me impulsaba a plasmar mis impresiones de forma escrita era el poder contarlo más adelante hasta la saciedad y la nausea, que me repito más que el ajo. Seguro que al leer esto estáis recordando todas esas veces que me contáis algo y yo espero pacientemente a que acabéis para empezar diciendo "ah, sí, a mí una vez...". No me lo tengáis en cuenta, soy humano, al menos de cintura para arriba**.
También ha habido cosas buenas, como la boda de unos amigos de toda la vida o algún que otro viaje que me ha hecho recordar que el tiempo pasa pero las hermanas quedan, que por cierto es el título de uno de los libros que leí este año. Esa es otra: este año he leído un montón en comparación con los anteriores, no por cantidad, que también, sino por concentración de lecturas en poco espacio de tiempo, pero es que la culpa fue mía al elegirme asignaturas de literatura y crítica literaria, aunque fuera "voluntariamente", claro. No se puede decir que haya estado realmente interesado en la mayoría de los temas que en ellas se trataba, pero al menos he descubierto que puedo ser crítico literario dando tan sólo mi opinión y que para justificarla sólo necesito decir que "en tal libro dice lo mismo que digo yo", lo cual no desprestigia en absoluto a los críticos actuales, sólo les facilita el trabajo, aunque si a mí me pagasen por dar mi opinión sobre libros dando referencias tened por seguro me apuntaba el primero donde fuera.
En fin, que mi situación actual ha cambiado, si bien no sustancialmente, sí de calidad de tiempo libre y de espacio vital. No hay más que fijarse en la cantidad de tiempo que le dedico al World of Warcraft últimamente en comparación al año anterior, que ni siquiera jugaba por falta de tiempo (y pelas). Ni que decir tiene que a partir de ahora se impone un cambio, porque es hora de renovarse o morir, así que iré haciendo como los gusanitos esos del Pokémon cuando quieren evolucionar, o sea, hacer el capullo, para poder mostraros el resultado más adelante. La verdad es que me siento como el protagonista de "Cadena Perpetua" cuando... bueno, cuando le pasa una cosa al final de la peli que no puedo contar porque... porque no es muy importante en absoluto para la trama y no tiene ninguna relevancia con el desenlace, pero que se siente desorientado sin saber qué hacer. Así me siento yo, poniendo el culo en una silla más o menos, pero con ganas renovadas de seguir pulsando teclas siguiendo el método de la escritura creativa y cantando lo mismo que Concha Velasco: Emocionada, agradecida, solamente quiero decir "¡Gracias por venir!".
...Y tendréis suerte si no llueve mañana.
*O al menos me la digan cuando me encuentran por la calle, que siempre es más directo.
**¿Demasiado picante? Bueno, es el cierre de la segunda temporada, me lo puedo permitir.
viernes, octubre 07, 2011
Plants Vs. Zombies
Este es el causante de todos mis vicios últimamente. ¿Alguna vez habéis enfrentado un repollo a uno de los protagonistas del Resident Evil (esos no, los otros)? Pues en este juego lo podéis hacer, con la salvedad de que si tu verdurita pierde tú perderás la cabeza, literalmente además.
SALVEDADES
Parece que he terminado pero todavía no me he hubicado en la situación actual de no tener que estudiar nada más por obligación. Cierto es que el término "por obligación" es muy ambiguo, porque nadie nos obliga a preparar el CAP tras acabar la carrera pero es necesario para todo lo que se nos ocurra relacionado con la enseñanza, así que "decidimos voluntariamente" pagar los 1800€ del máster de universo que es ahora para así tener opción de ganar un sueldo mediocre en un colegio o instituto privado. También es cierto que nos pagan en estrés y nervios, así que se puede considerar que parte de la nómina va en especies, pero casi que prefiero el método tradicional de más dinero, qué quieres que te diga.
El caso, que me devío del tema, es que todavía no me he hecho a la idea de haber cerrado un ciclo que ha ocupado un tercio de mi vida, que se dice pronto. Me dicen por la línea 2 que ya lo notaré en febrero o junio cuando yo no tenga que hacer exámenes y el resto del universo sí, pero yo le respondo a la línea 2 que el término "hacer exámenes" es también muy ambiguo, porque es cierto que yo no tendré que presentarme a ellos, pero también lo es que tendré que prepararlos, presentarlos, corregirlos y explicarlos para que tanto padres como hijos queden satisfechos con el resultado. De hecho, ayer mismo se me quejó uno de ellos diciendo que su hija iba demasiado contenta y relajada a clase, que él prefiere que vaya más ahogada y estresada, a lo cual yo tuve dos reacciones simultáneas: la primera, que menos mal que ese señor no es mi padre; la segunda, que ese señor no tiene ni idea de lo que es un buen ambiente de estudio ni lo ha conocido jamás; y también hubo una tercera, pero algo posterior, que fue la idea remota de que suponía que si su hija se divertía en clase no estaba aprendiendo nada, a lo cual no tengo más remedio que referirme a los otros dos puntos anteriores, señoría. ¿Cómo es posible que todos los padres se atreven a opinar sobre el trabajo de los profesores de sus hijos pero nadie puede decirles nada acerca del suyo como padres?
En resumen, y para no irme más por las ramas, que he tenido que sustituir mis mañanas de universidad (y todo lo relativo a ella), los almuerzos fuera de casa y las tardes de trabajo hasta las tantas por mañanas de buscar trabajo, hacer papeleos y recados del trabajo y de casa, preparar las clases de la tarde y demás, almuerzos en casa a toda prisa y tardes de trabajo hasta las tantas. A simple vista no se aprecia la diferencia, pero cuando uno se fija de verdad se ve que no hay ninguna en absoluto: vives estresado igualmente como si las fechas de apretasen el gaznate, y eso que ahora se supone que tienes libertad para planificarte todo a tu aire, pero es que el término "libertad" es también muy ambiguo: de entrada, referido al trabajo, es una esclavitud permitida que nos imponemos "voluntariamente", sobre todo cuando tenemos cosas que pagar, pero lo disfrazan diciendo que tienes "libertad" para actuar como desees en tu puesto de trabajo, cosa que suele significar que tienes "libertad" para hacer lo que yo te diga o irte por la puerta. En mi caso, como acabo de entrar a trabajar y tienen que explicarme todo (o al menos deberían haberlo hecho alguna vez), me han dicho que no tengo "obligación" de hacerles exámenes a los alumnos y me han aclarado que puedo ponerlos cuando a mí me venga bien, pero que se hacen cada tres meses regularmente sin posibilidad de cambiar las fechas porque coinciden con las de los colegios, así que yo "voluntariamente" acepto esas fechas y hago uso de esa "libertad" que me ofrecen mis superiores, todo por el bien de puesto de trabajo.
Como véis, siempre hay posibilidad de elección, y hay pequeños matices al respecto, pero eso son sólo salvedades. No obstante, si no me gustase este trabajo no lo haría, claro está.
martes, septiembre 27, 2011
Dido
Esta mujer tiene el nombre de una antigua leyenda que estudié cuando traducía latín en el instituto, pero recientemente recordé una de las canciones que más me gustaron de su repertorio, como siempre, traducida libremente cual mariposilla de campo.
DEPREDADOR
Con ver la luz de la habitación ya sé que estás despierto cuando llego a casa. Con sólo poner un pie en la escalera ya sé cómo me mirarás cuando esté ahí contigo.
Si fueras un rey sentado en su trono, ¿serías lo suficientemente sabio como para dejarme a mi aire, para dejar a esta reina que crees únicamente tuya?
Yo sólo quería ser un cazador otra vez. Quería enfrentarme al mundo por mi cuenta otra vez, darle una oportunidad a la vida otra vez... así que déjame libre.
Un libro sin leer, una mirada acusadora, la televisión está encendida pero sin sonido. Una larga pausa y luego comentas "vaya, mira quién ha venido".
Si eres el rey que dices que eres, ¿por qué no eres lo suficientemente listo para dejarme a mi aire?
Porque esta reina que tú crees enteramente tuya quiere ser un cazador otra vez. Quiero enfrentarme al mundo por mi cuenta otra vez... así que déjame libre.
La corona que pusiste sobre mi cabeza en su momento ahora me parece un yugo, y no sé cómo te voy a decir esto pero sé que acabaré sonriendo cueste lo que cueste, y siempre estoy dándole vueltas, constantemente...
Quiero ser un cazador otra vez. Quiero enfrentarme al mundo por mi cuenta otra vez, darle una oportunidad a la vida otra vez... así que me voy, libre.
Dido - Hunter
(Esta canción me gusta mucho desde que salió allá por el renacimiento victoriano, pero últimamente me siento bastante identificado con la letra... quitando lo de reina y demás, claro, que de reinas está el mundo lleno pero yo no soy una).
(Os preguntaréis lo del título traducido a "depredador" y lo del cambio de género de la letra, pues bien, es que me sonaba mejor que "cazadora", que siempre acabo haciendo el mismo chiste de ropa y me repito, sólo por eso... y por ponerlo como yo quería, claro).
DEPREDADOR
Con ver la luz de la habitación ya sé que estás despierto cuando llego a casa. Con sólo poner un pie en la escalera ya sé cómo me mirarás cuando esté ahí contigo.
Si fueras un rey sentado en su trono, ¿serías lo suficientemente sabio como para dejarme a mi aire, para dejar a esta reina que crees únicamente tuya?
Yo sólo quería ser un cazador otra vez. Quería enfrentarme al mundo por mi cuenta otra vez, darle una oportunidad a la vida otra vez... así que déjame libre.
Un libro sin leer, una mirada acusadora, la televisión está encendida pero sin sonido. Una larga pausa y luego comentas "vaya, mira quién ha venido".
Si eres el rey que dices que eres, ¿por qué no eres lo suficientemente listo para dejarme a mi aire?
Porque esta reina que tú crees enteramente tuya quiere ser un cazador otra vez. Quiero enfrentarme al mundo por mi cuenta otra vez... así que déjame libre.
La corona que pusiste sobre mi cabeza en su momento ahora me parece un yugo, y no sé cómo te voy a decir esto pero sé que acabaré sonriendo cueste lo que cueste, y siempre estoy dándole vueltas, constantemente...
Quiero ser un cazador otra vez. Quiero enfrentarme al mundo por mi cuenta otra vez, darle una oportunidad a la vida otra vez... así que me voy, libre.
Dido - Hunter
(Esta canción me gusta mucho desde que salió allá por el renacimiento victoriano, pero últimamente me siento bastante identificado con la letra... quitando lo de reina y demás, claro, que de reinas está el mundo lleno pero yo no soy una).
(Os preguntaréis lo del título traducido a "depredador" y lo del cambio de género de la letra, pues bien, es que me sonaba mejor que "cazadora", que siempre acabo haciendo el mismo chiste de ropa y me repito, sólo por eso... y por ponerlo como yo quería, claro).
miércoles, septiembre 21, 2011
Flawless victory
Vale, puede que si miramos lo que he tardado en terminar la carrera no sea tan "flawless", pero si tenemos en cuenta que en los últimos tres años no he suspendido ninguna asignatura al menos puedo decir que no ha sido un esfuerzo en vano. Centrémonos en la parte resaltada en rojo, ¿vale?
NO PRESENTADO
Para contar esta historia tengo que volver al principio. El 29 de agosto de 1981 nací... bueno, quizás me he ido un poco muy al principio, vayámonos 30 años después de eso, concretamente al mes de octubre del 2010, AHÍ es donde comienza esta historia realmente:
Último año de carrera, tengo sólo cinco asignaturas y parece que estoy llegando a la recta final de lo que parecía lo más a disgusto que he tenido que hacer en mi vida*, sólo tengo que ponerme de acuerdo con los profesores para dejar claro que pretendo terminar ese año y dedicarle todo mi esfuerzo a tan fructífera empresa para acabar con eso. Sólo hay un problema: el momentum.
¿A qué me refiero con eso? Pues bien, en un principio el momentum no tiene por qué ser malo, es simplemente una reacción descontrolada respecto a un estímulo externo provocado por un exceso de emociones, lo cual puede derivar en que algunos profesores me tratan tremendamente bien en clase e incluso tienen mucho más en cuenta mi opinión ya que casi era un licenciado, pero también puede salir el tiro por la culata y repercutir en la obcecación de cierta gente en que iba a tener que sudar tinta para quitarme la última asignatura de la carrera.
Tras un maravilloso catorce en la quiniela de los exámenes de junio, supuse que la última nota que me quedaba por saber sería precisamente la que más me haría esperar**. Es por eso que, a pesar de que era la que más esfuerzo me había requerido, aunque a nivel consciente consideraba que no había de qué preocuparse, incluso aunque no pudiera dormir bien por las noches, me dejó completamente anonadado el ver un "no presentado" en el examen. Cuando me recuperé del trauma momentáneo fui a hablar con el profesor para descubrir que en realidad me había hecho un favor, porque así podría sacar mejor nota en septiembre y así me estudiaría todo otra vez. Al parecer, el hecho de que la última asignatura de la carrera de alguien sea una optativa no le resta importancia, todo lo contrario, la convierte en la asignatura más importante del universo de humanidades.
Pues bien, tras un verano entero haciendo eternos y extensísimos cuestionarios que había que entregar para ganarse el derecho a examen, además de estudiar, decido ir cuatro días antes del examen a la tutoría del profesor para confirmar la fecha y hora del mismo, pero se me ocurrió que podría recordarle, muy humilde y educadamente, que en esa convocatoria me juego el tener que matricularme otra vez y el perder la oportunidad de poder trabajar en octubre si suspendía con el único fin de apelar a su comprensión y buena voluntad. La verdad, tengo que decir que buena voluntad sí que tuvo, sobre todo porque me dijo a lunes a mediodía que había que volver a entregar los nueve trabajos del curso OTRA VEZ si quería poder presentarme al examen del viernes por la mañana, puesto que de esa manera le demostraba que había asistido a clase*** y de no hacerlo suspendería irremediablemente, así que le agradecí el consejo y me fui a tomarme cuatro tilas[4].
La cosa estaba clara: tenía mucho que hacer y poco tiempo para ello, así que era el momento de empezar a dejar de hacer lo que no fuera estrictamente necesario.
-Respirar: por desgracia, todavía no he encontrado la manera de eliminar este vicio que tengo, así que tendré que seguir consumiendo oxígeno. Aparte, respirar sienta bien y es sano.
-Comer: si no como, aparte de que mis amigos probablemente se podrían en alerta infrarroja fluorescente, no creo que tuviera la fuerza necesaria para hacer todo lo que tengo pendiente, así que seguiré dedicándole media hora a metabolizar alimentos mientras me estreso por estar perdiendo el tiempo.
-Dormir: mira, esto no creo que me cueste mucho dejarlo porque no me gusta perder el tiempo en la cama y por la noche es cuando mejor escribo, así que con reducirlo a 3-4 horas de sueño al día creo que será suficiente. Total, sólo será esta semana.
-Amigos: me pasa como con Australia, que sé que existen pero me pillan muy lejos para ir a verlos, al menos hasta que termine de exámenes.
-Tele: para ver por enésima vez los mismos capítulos de "Big Bang Zíory" o "Entre Fantasmicos" prefiero dormir, y como dormir ha sido relegado a la posición de "no imprescindible" pues seguiré estudiando, que hay que escribir mucho.
-Ordenador: bueno, siempre puedo hacer un descanso de escribir los trabajos, escribir los cuestionarios y escribir los resúmenes de los temas para escribir algo en mi blog, así hago algo diferente.
Así que decidí dejar de dormir y demás chupipandas para dedicarme en exclusiva a mi nueva amante modelo[5] durante los tres días y medio que tenía antes del examen. Como resultado, debido a una bendición divina de no sé qué deidad de las que hay, el jueves por la mañana a las 9:50 acabé de escribir el último apartado del último trabajo y el cuerpo me pidió que dejara de levantarme a las 7:00 habiéndome acostado a las 3:30, pero yo le respondí que "falta el sprint final, no me falles". El resto del día lo pasé releyendo los trabajos por si hubiera que cambiar algo pero parece que "a mi estilo no le sienta nada mal el estar al borde de un ataque de nervios"[6], así que no tuve que modificar nada y los imprimí tranquilamente... todo lo tranquilamente que el estar en la víspera del examen que decidía mi futuro me permitía estar, claro.
A la mañana siguiente, y tras haber dormido más bien poco, nos presentamos en el aula a esperar al profesor, y digo "nos" porque estábamos dos personas inicialmente y luego subimos a nueve, que no vayáis a pensar que estábamos más, pero yo hice mi examen como si se tratase de las oposiciones de notario... al menos hice lo que pude en el tiempo que nos dejó, porque cuando decidió que en vez de tres horas que teníamos concertadas para el examen nos iba a dejar sólo hora y media uno se empieza a plantear si te dará tiempo a todo, y con razón. El caso es que empecé el examen y pude hacer sin prisas tres de cuatro preguntas pero no me dio tiempo a la cuarta porque prácticamente se estaba yendo por la puerta y yo quería entregarle lo que había hecho, pero con eso acabó la primera parte de mi calvario, y digo primera parte porque esto no es para nada el final de la historia.
Antes de irse, el profesor nos dijo que el lunes recibiríamos un mensaje automático de la universidad diciéndonos la nota provisional del examen y que podríamos ir a la revisión al día siguiente en caso de que hubiera alguna duda, así que yo me propuse olvidarme completamente del tema durante el fin de semana y dormir mucho muchísimo esa misma tarde[7] para así estar preparado para la noticia el lunes fuera la que fuera, pero con lo que no contaba yo era con que al llegar a casa tras hacer el examen ya tendría el mensaje automático con la nota puesta en el correo: "no presentado". Al ver y comprobar que el mensaje era efectivamente el que mandaba el servidor de la universidad cuando recibía las actas dejé de respirar y creo que hasta se me paró el corazón durante un segundo, más que nada porque no podía ser que no me hubiera presentado teniendo en cuenta que justo acababa de volver de la convocatoria, así que ya empecé a darle vueltas a la cabeza sin conseguir nada que no fuera estresarme aún más.
Primero pensé que eso podría ser un acta automática del servidor y que el profesor se había olvidado de desconectarla, pero no tenía sentido ya que él mismo nos había dicho que colgaría las notas el lunes; luego pensé que era de otra asignatura, pero no podía ser eso porque no me quedaban más en la carrera, así que lo descarté; en tercer lugar pensé que era posible que no hubiera recibido los trabajos y me hubiera cancelado la convocatoria por ello, pero eso seguro que no era porque le dije que los tenía en el casillero y él me dijo que iría a recogerlos al terminar, así que eso tampoco era posible; y por último pensé lo peor que se puede pensar cuando uno no quiere agobiarse: se ha propuesto que repita a cualquier precio, y como los trabajos son a mano no hay manera de repetirlos si no es haciéndolos otra vez. El caso es que, poniéndome en lo peor, creo que perdí tres kilos ese fin de semana, y tengo que decir que mis padres no son lo más aconsejable en temática de dar ánimos, así que no les dije nada al respecto, sólo que estaba nervioso por la nota[8].
Cuando llegó el lunes esperé ansioso algún mensaje del servidor de la universidad que contradijera lo que leí el viernes, pero no llegó ninguno, lo que confirmaba mis temores terriblemente, así que la opción más próxima era decirle a todo el mundo que la nota salía el martes y esperar a la revisión de exámenes para dar un veredicto final. Tenía verdadera curiosidad por ver qué justificación daría al mensaje después de haberme visto en el examen por simple que fuera, aunque sólo fuera para calmar las ascuas que tenía dentro desde hacía tres días, así que yo me puse en lo peor otra vez y empecé a hacer planes sobre cómo quitarme la asignatura en diciembre y buscar trabajo mientras para poder pagar la matrícula. No obstante, lo peor no iba a ser tener que volver a sentirme humillado injustamente, sino el tener que escuchar constantemente que no me había esforzado lo suficiente, que la culpa de todo la tenían mis aficiones, que mis amigos no son buenas compañías y demás repertorio que se utiliza cuando se pretende hacer leña del árbol caído en lugar de animar al que lo ha perdido todo[9].
Cuando llegó a su despacho me preguntó si estaba esperando para ver mi examen, a lo que yo respondí que sí pero que la nota me resultaba un poco extraña para lo que yo creía que había hecho. Al parecer, el hecho que tuviera "no presentado" lo desconcertó y me dijo que no era posible, que recordaba mi examen y que tenía mis trabajos ahí, así que no podía haber recibido esa notificación. Personalmente, el hecho de que alguien ponga en duda hechos que no se pueden negar porque son realidades me crispa los nervios extremadamente, pero no sé qué me pasó que me mantuve calmado y formal todo el tiempo de la revisión. Cuando el profesor se planteó la posibilidad de comprobar el listado de notas para ver qué había pasado yo ya me temía que me diera alguna justificación para tener que pasar por todo eso otra vez el año siguiente, pero resultó que sólo se había equivocado al pasar las notas, que le había puesto mi 7'5 a otro alumno pero que eso se podía corregir inmediatamente. ¡AH, VALE! ¡SI ES SÓLO ESO...!
Pues sí, eso era todo: otra persona había recibido mi nota y yo la suya, así que tras el cambio del profesor yo recibí mi merecido notable y mi tan ansiada licenciatura, cuyo título recibiré más adelante cuando el estado me permita pagar las tasas de una buena vez. Y ahora vamos a la parte interesante: ¿Qué hubiera pasado si...?
-¿...yo no hubiera ido a la revisión de exámenes por estar tremendamente deprimido y convencido de mi suspenso inmerecido? Pues que una persona que ni siquiera se había presentado al examen hubiera tenido una notaza y yo una necesidad ingente de un psicoanalista.
-¿...en el examen hubiera tenido una hora más? Pues que a los quince minutos hubiera terminado mi examen y hubiera tenido una nota mejor, porque podéis hacer cuentas si queréis.
-¿...dicho error no se hubiera producido? Pues yo habría sido un hombre feliz durante dos días más en lugar de tener que mentirles a mis familiares y amigos pensando que no había servido nada de lo que había hecho, aunque también es cierto que no hubo mala intención por parte del profesor... espero.
-¿...se lo hubiera contado a mis padres? Pues que se habrían hartado de decirme "te lo dije" durante tres días y luego, al recibir la nota real, se habría callado como mujos sin intención ninguna de disculparse, que sería lo ideal para no tener que admitir que uno no tenía razón.
En fin, que por fin ha terminado esta etapa y que espero que la siguiente sea mejor, aunque todavía me queda recoger el título y todos los trámites, así que no cerraré la segunda temporada todavía, que siempre se puede contar algo desde el otro lado que resulte interesante, aunque sólo sea por pasar el rato. Gracias por las felicitaciones a todos los que ya me habéis llamado, aunque ahora podéis conocer la verdadera historia de mi plan de adelgazamiento en tres días. ¡No pierda la oportunidad!
*Incluso más que cuando tuve que presentarle los temas orales a Doña Manolita en Ciencias Sociales en el colegio, aunque creo que podría considerarse más de lo mismo.
**Porque el concepto del tiempo siempre es relativo. Recordemos el ballet moderno de Madonna y sus enseñanzas al respecto.
***Sí, no tiene sentido por lo de que ya los tenía antes, ¿pero qué le iba a decir yo? ¿Que no?
[4] Cómo estaría interiormente que hasta Alex me dijo que "se me veía apocalíptico".
[5] Miss Tareas Pendientes.
[6] Jesús dixit.
[7] Suponiendo que no cayera inconsciente en el autobús antes de llegar a mi casa, claro.
[8] Aunque también es cierto que no le dije nada a nadie por si acaso me decían que era mi culpa por no haber hecho algo irrisorio o por haberle dicho que me pusiera las cosas más fáciles sin decirlo.
[9] Es que este año era la última vez que podía asistir a clase de esa asignatura porque se extinguía el plan y desaparecían todas, así que imaginad cómo sería tener que estudiar eso en casa solo, sin ayuda y... bueno, sí me lo imagino, sí.
lunes, septiembre 19, 2011
The Gate of Doom
Siempre tengo el temor a repetir foto o título cada vez que escribo algo en el blog, será porque no llevo un índice de temas, que debería hacer en algún momento, o simplemente porque llevo ya tantos temas escritos con fotos que normalmente no están relacionadas que no me da la memoria para tanto. Me pregunto si la memoria es finita porque tiene un límite o porque al ser estrecha le cabe poco.
FINAL QUEST
Pues sí: mañana sabré si se me puede considerar licenciado por fin o sigo siendo alguien a las puertas de obtener un título universitario, en cuyo caso seguiré como estoy hasta ahora sólo que más cansado de todo y buscando sin éxito un trabajo decente. ¿Será todo como en mis pesadillas, en las que yo sufría la ira y frustración de un alma amargada en su propia cárcel, o será como me han pronosticado tantas veces mis amigos este fin de semana, que he aprobado de calle y me podré olvidar para siempre de esa horrible etapa de mi vida? Próximamente en sus pantallas.
El caso es que todo el mundo al que pregunto siempre me da buenas impresiones de su etapa universitaria, como si hubiera sido algo que les gustaría revivir porque más que estudiar se dedicaban a salir de fiesta sin preocupaciones, pero en mi caso no ha sido así en absoluto: los tres últimos años he tenido que compaginar trabajo con estudios, con oposiciones, con ayudar a mi madre en sus estudios, con ayudar a mi padre con sus libros y con afrontar las chorradas familiares y extrafamiliares de todo ese tiempo, pero no he recibido ni un solo halago, al contrario, todo lo que oía en casa era que siempre podría haber hecho más. Me pregunto si realmente tenían razón, siempre podría haber dejado de dormir.
Mi auténtico problema es que en ese período me ha cambiado el carácter, cosa que no me gusta en absoluto. Por si el hecho de que inconscientemente empiezo todas las frases por "yo", declarando una falta de atención exacerbada, no me resultase ya lo suficientemente repugnante, encima me he vuelto irascible a cualquier comentario remotamente ofensivo por parte de mis padres y tengo la siempre presente impresión de soledad en el mundo, lo cual no sé si está relacionado con este tema pero seguro que Freud lo enlaza de alguna manera al haber nombrado a mis padres. Si a esto le añadimos el estrés permanente en el que vivo a pesar de que no puedo hacer nada excepto esperar, tenemos que me he vuelto monotemático y recurrente respecto a las conversaciones, lo que no es específicamente entretenido cuando consigo que alguien me saque a tomar café, pero supongo que será pasajero*.
Como añadido a mis taras psicológicas adquiridas causadas porque llevo ya tres años sin vacaciones más largas de cinco días, está la presión constante por buscar/encontrar la pareja deseada, cosa que parece que lo voy a relegar a la lista de "bueno, si tiene que ocurrir, ocurrirá, total, los milagros existen", justo debajo de que me toque la lotería y, como no, acabar la carrera. Porque, seamos sinceros, yo sabía interiormente que tarde o temprano llegaría el día, pero a nivel consciente no creía que fuera a acabar nunca esta ordalía a la que me sometieron mis padres cuando me eligieron los estudios**.
Mañana veré... o no.
*Por la cuenta que me trae, porque mi padre es igual.
**Supongo que por mi bien, pero mejor no me pongo a comparar el antes y el después no sea que las cuentas salgan a devolver.
FINAL QUEST
Pues sí: mañana sabré si se me puede considerar licenciado por fin o sigo siendo alguien a las puertas de obtener un título universitario, en cuyo caso seguiré como estoy hasta ahora sólo que más cansado de todo y buscando sin éxito un trabajo decente. ¿Será todo como en mis pesadillas, en las que yo sufría la ira y frustración de un alma amargada en su propia cárcel, o será como me han pronosticado tantas veces mis amigos este fin de semana, que he aprobado de calle y me podré olvidar para siempre de esa horrible etapa de mi vida? Próximamente en sus pantallas.
El caso es que todo el mundo al que pregunto siempre me da buenas impresiones de su etapa universitaria, como si hubiera sido algo que les gustaría revivir porque más que estudiar se dedicaban a salir de fiesta sin preocupaciones, pero en mi caso no ha sido así en absoluto: los tres últimos años he tenido que compaginar trabajo con estudios, con oposiciones, con ayudar a mi madre en sus estudios, con ayudar a mi padre con sus libros y con afrontar las chorradas familiares y extrafamiliares de todo ese tiempo, pero no he recibido ni un solo halago, al contrario, todo lo que oía en casa era que siempre podría haber hecho más. Me pregunto si realmente tenían razón, siempre podría haber dejado de dormir.
Mi auténtico problema es que en ese período me ha cambiado el carácter, cosa que no me gusta en absoluto. Por si el hecho de que inconscientemente empiezo todas las frases por "yo", declarando una falta de atención exacerbada, no me resultase ya lo suficientemente repugnante, encima me he vuelto irascible a cualquier comentario remotamente ofensivo por parte de mis padres y tengo la siempre presente impresión de soledad en el mundo, lo cual no sé si está relacionado con este tema pero seguro que Freud lo enlaza de alguna manera al haber nombrado a mis padres. Si a esto le añadimos el estrés permanente en el que vivo a pesar de que no puedo hacer nada excepto esperar, tenemos que me he vuelto monotemático y recurrente respecto a las conversaciones, lo que no es específicamente entretenido cuando consigo que alguien me saque a tomar café, pero supongo que será pasajero*.
Como añadido a mis taras psicológicas adquiridas causadas porque llevo ya tres años sin vacaciones más largas de cinco días, está la presión constante por buscar/encontrar la pareja deseada, cosa que parece que lo voy a relegar a la lista de "bueno, si tiene que ocurrir, ocurrirá, total, los milagros existen", justo debajo de que me toque la lotería y, como no, acabar la carrera. Porque, seamos sinceros, yo sabía interiormente que tarde o temprano llegaría el día, pero a nivel consciente no creía que fuera a acabar nunca esta ordalía a la que me sometieron mis padres cuando me eligieron los estudios**.
Mañana veré... o no.
*Por la cuenta que me trae, porque mi padre es igual.
**Supongo que por mi bien, pero mejor no me pongo a comparar el antes y el después no sea que las cuentas salgan a devolver.
jueves, septiembre 08, 2011
Angkor-Wat
Descanso después de estudiar y he decidido ponerme música. Qué suerte he tenido que ha salido una de mis canciones favoritas, más que nada por el mensaje que contiene. "¿Y qué mensaje contiene, profe?" Ah, pues me alegra que me lo preguntéis, porque hace nada recordé que creí que había encontrado un tesoro pero resultó ser un reflejo en las olas.
CIRCUSSED
Ven ven ven, acércate a la luz. El amor, esa noche tan especial. Fíjate bien y haz que llegue a pasar. ¿No sabes que todo eso está en tu mirada?
Ven ven ven, acéptalo esta noche. El placer, tan secretamente seductor. No, nunca lo dejes pasar, tan grotesco y tan burlesco.
Si prestas atención te darás cuenta de que la vida no espera, es ahora o nunca.
¡Que empiecen los juegos! ¿No ves que cuando sale tu lado más bizarro tienes que dejarte llevar? Vamos a jugar, entra en la arena y no lo dejes pasar.
El tiempo se detendrá sin bajar el telón. Más más más, algo zumba en tu cabeza. Déjate dominar por completo, vamos, ámalo. Haz que te guste.
Porque como celebración, cada creación perdida tiene la oportunidad de vivir para siempre.
¡Que empiecen los juegos! ¿No comprendes que cuando salga tu lado más oculto tienes que ser tú mismo? Vamos a jugar, entraremos en la arena y verás que yo nunca lo mando callar. Pero ¿qué sabrás tú? ¿Quién te crees que eres para decirme hoy que jamás jugarás conmigo?
¡Que empiecen los juegos! ¿Todavía no entiendes que cuando surja tu lado más interno tendrías que sentirte bien? Podríamos jugar, entrarías en la arena y te darías cuenta de que yo nunca lo dejaría pasar. Pero ¿tú qué podrías saber? ¿Quién te crees que eres para decirme hoy "de este agua no beberé"? En el camino te veré.
Infernal - Circussed
(Traducción libre, aunque en este caso no he tenido que cambiar mucho para que signifique lo que yo quería que significase. Es lo que tiene que sea uno de mis grupos favoritos, que en muchos aspectos nos reconforta que alguien cante lo que pensamos*).
*Hay que ver la cuerda filosófica que me da el tema de la música, por favor. Algún día tendría que escribir sobre ello... más.
CIRCUSSED
Ven ven ven, acércate a la luz. El amor, esa noche tan especial. Fíjate bien y haz que llegue a pasar. ¿No sabes que todo eso está en tu mirada?
Ven ven ven, acéptalo esta noche. El placer, tan secretamente seductor. No, nunca lo dejes pasar, tan grotesco y tan burlesco.
Si prestas atención te darás cuenta de que la vida no espera, es ahora o nunca.
¡Que empiecen los juegos! ¿No ves que cuando sale tu lado más bizarro tienes que dejarte llevar? Vamos a jugar, entra en la arena y no lo dejes pasar.
El tiempo se detendrá sin bajar el telón. Más más más, algo zumba en tu cabeza. Déjate dominar por completo, vamos, ámalo. Haz que te guste.
Porque como celebración, cada creación perdida tiene la oportunidad de vivir para siempre.
¡Que empiecen los juegos! ¿No comprendes que cuando salga tu lado más oculto tienes que ser tú mismo? Vamos a jugar, entraremos en la arena y verás que yo nunca lo mando callar. Pero ¿qué sabrás tú? ¿Quién te crees que eres para decirme hoy que jamás jugarás conmigo?
¡Que empiecen los juegos! ¿Todavía no entiendes que cuando surja tu lado más interno tendrías que sentirte bien? Podríamos jugar, entrarías en la arena y te darías cuenta de que yo nunca lo dejaría pasar. Pero ¿tú qué podrías saber? ¿Quién te crees que eres para decirme hoy "de este agua no beberé"? En el camino te veré.
Infernal - Circussed
(Traducción libre, aunque en este caso no he tenido que cambiar mucho para que signifique lo que yo quería que significase. Es lo que tiene que sea uno de mis grupos favoritos, que en muchos aspectos nos reconforta que alguien cante lo que pensamos*).
*Hay que ver la cuerda filosófica que me da el tema de la música, por favor. Algún día tendría que escribir sobre ello... más.
To-Do List
Ojalá pudiera yo decir eso, pero estos días están siendo infernales (como ya dije antes). El problema de todo eso es que a mí me da la ansiedad, me altera el sueño, me anula el descanso, me cambia los horarios de las comidas, me trastorna el humor, me aletarga el sentido temporal y me produce esa sensación horrenda de nervios incontrolados incluso cuando se supone que estoy tranquilo.
¿Cuándo acabará esto?
ESTUDIAR... O NO
Ayer me propuse tomarme el día tranquilo para quitarme el malestar general que me está produciendo la última asignatura de la carrera, no sólo por lo horrendo de tener que estudiarla todo el día, sino porque he visto en uno de mis mejores amigos los posibles resultados negativos y me he dado cuenta* de que no me gustaría nada tener que pasar por lo mismo otra vez, incluso aunque fuera hasta diciembre. Pues bien, gracias a mi pereza extrema hereditaria, tenía una infinidad de opciones de ocio con el fin de que mi mente se relajase y se olvidase de las presiones aunque sólo fuera por un día, la pena es que yo no contaba con que mi subconsciente iba a hacer de las suyas.
Lo primero que se me ocurrió es ir a ver la tele, que todavía echaban las series que me gustan en plan maratón y podría desconectar un par de horas o tres. Me alegró ver que había programados dos capítulos de "Bones", otros dos de "Entre Fantasmas" y cuatro o cinco de "Big Bang Theory", porque sólo con eso ya estaría entretenido toda la tarde, pero cuál fue mi sorpresa cuando descubrí que ¡me estaba aburriendo! ¡No hacía nada más que pensar que tendría que estar haciendo algo más útil! Aún así me obligué a ver al menos dos capítulos con tal de no pensar en nada, pero fue en vano. No sirve de nada obligarte a relajarte, por definición propia.
Tras mi primer fracaso, se me ocurrió que podría llamar a alguno de mis amigos para hablar un rato y así contarnos qué tal nos va, que un poco de conversación trivial siempre viene bien para soltar tensión. La conversación comenzó como siempre y de manera natural, al menos así fue hasta que yo sentí la carcoma interior debatiéndose por tomar el control de mi boca y cambiar el tema a "¡qué ganas tengo de quitarme el examen de encima!", cosa que así ocurrió a pesar de todo lo que me resistí. Esa sensación de que en realidad no estás oyendo lo que está diciendo la otra persona sino que estás pensando en lo que quieres decir nada más termine de hablar no me gusta en absoluto, más que nada porque convierte las conversaciones en monólogos, pero no pude hacer nada por evitarlo: acabamos hablando de mi examen y de lo estresado que estaba, así que no sirvió de nada la llamada.
Como último recurso intenté leer cómics en el ordenador**, que hacía ya tiempo que no me compraba ninguno y estaba perdiendo el hábito de hacer como que leo por gusto, así que hice caso a Alfre y busqué una serie que él estaba siguiendo desde hacía un tiempo. Bueno, tengo que admitir que me sirvió para no estar pensando en nada más que en el argumento de la serie, que me pareció muy buena, incluso me reí en algunos momentos por las bestialidades que le ocurrían al protagonista y realmente me sentía invitado a seguir leyendo más mientras cenaba, lo cual parecía indicar que había conseguido descansar la mente por fin... o al menos eso pensaba hasta que, cuando terminé de leer, me dí cuenta de que estaba con los pies apoyados de puntillas sobre el suelo, la espalda completamente curvada hacia adelante con los hombros encogidos, las manos como si fueran garras en tensión sobre el teclado y las piernas moviéndose nerviosamente sin que yo lo controlase. Total: no sirvió de nada tampoco, así que intenté descansar algo por la noche.
A la mañana siguiente estaba igual de cansado que siempre a pesar de no haber hecho nada el día anterior, con la diferencia de un sentimiento horrible de culpa que me corroía por dentro por haber perdido un día para nada. Vamos, que si al menos me hubiera cambiado algo la moral ya hubiera sido algo pero es que ni eso. Menos mal que sólo quedan 9 días.
*Una cosa es saber algo y otra muy distinta es SABERLO.
**Sí, el mismo que utilizo para estudiar, lo cual ya era preludio del desastre.
¿Cuándo acabará esto?
ESTUDIAR... O NO
Ayer me propuse tomarme el día tranquilo para quitarme el malestar general que me está produciendo la última asignatura de la carrera, no sólo por lo horrendo de tener que estudiarla todo el día, sino porque he visto en uno de mis mejores amigos los posibles resultados negativos y me he dado cuenta* de que no me gustaría nada tener que pasar por lo mismo otra vez, incluso aunque fuera hasta diciembre. Pues bien, gracias a mi pereza extrema hereditaria, tenía una infinidad de opciones de ocio con el fin de que mi mente se relajase y se olvidase de las presiones aunque sólo fuera por un día, la pena es que yo no contaba con que mi subconsciente iba a hacer de las suyas.
Lo primero que se me ocurrió es ir a ver la tele, que todavía echaban las series que me gustan en plan maratón y podría desconectar un par de horas o tres. Me alegró ver que había programados dos capítulos de "Bones", otros dos de "Entre Fantasmas" y cuatro o cinco de "Big Bang Theory", porque sólo con eso ya estaría entretenido toda la tarde, pero cuál fue mi sorpresa cuando descubrí que ¡me estaba aburriendo! ¡No hacía nada más que pensar que tendría que estar haciendo algo más útil! Aún así me obligué a ver al menos dos capítulos con tal de no pensar en nada, pero fue en vano. No sirve de nada obligarte a relajarte, por definición propia.
Tras mi primer fracaso, se me ocurrió que podría llamar a alguno de mis amigos para hablar un rato y así contarnos qué tal nos va, que un poco de conversación trivial siempre viene bien para soltar tensión. La conversación comenzó como siempre y de manera natural, al menos así fue hasta que yo sentí la carcoma interior debatiéndose por tomar el control de mi boca y cambiar el tema a "¡qué ganas tengo de quitarme el examen de encima!", cosa que así ocurrió a pesar de todo lo que me resistí. Esa sensación de que en realidad no estás oyendo lo que está diciendo la otra persona sino que estás pensando en lo que quieres decir nada más termine de hablar no me gusta en absoluto, más que nada porque convierte las conversaciones en monólogos, pero no pude hacer nada por evitarlo: acabamos hablando de mi examen y de lo estresado que estaba, así que no sirvió de nada la llamada.
Como último recurso intenté leer cómics en el ordenador**, que hacía ya tiempo que no me compraba ninguno y estaba perdiendo el hábito de hacer como que leo por gusto, así que hice caso a Alfre y busqué una serie que él estaba siguiendo desde hacía un tiempo. Bueno, tengo que admitir que me sirvió para no estar pensando en nada más que en el argumento de la serie, que me pareció muy buena, incluso me reí en algunos momentos por las bestialidades que le ocurrían al protagonista y realmente me sentía invitado a seguir leyendo más mientras cenaba, lo cual parecía indicar que había conseguido descansar la mente por fin... o al menos eso pensaba hasta que, cuando terminé de leer, me dí cuenta de que estaba con los pies apoyados de puntillas sobre el suelo, la espalda completamente curvada hacia adelante con los hombros encogidos, las manos como si fueran garras en tensión sobre el teclado y las piernas moviéndose nerviosamente sin que yo lo controlase. Total: no sirvió de nada tampoco, así que intenté descansar algo por la noche.
A la mañana siguiente estaba igual de cansado que siempre a pesar de no haber hecho nada el día anterior, con la diferencia de un sentimiento horrible de culpa que me corroía por dentro por haber perdido un día para nada. Vamos, que si al menos me hubiera cambiado algo la moral ya hubiera sido algo pero es que ni eso. Menos mal que sólo quedan 9 días.
*Una cosa es saber algo y otra muy distinta es SABERLO.
**Sí, el mismo que utilizo para estudiar, lo cual ya era preludio del desastre.
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