sábado, diciembre 17, 2011
Curiosidades
Uno esperaría encontrarse eso por la zona de los polígonos industriales y demás, pero cuando uno acaba de ver una exposición sobre la ruta de la seda en un museo y la siguiente que se encuentra es la "Sala X" no puede sino asustarse. Claro que, habiendo salido de la IX no es tan sorprendente, ¿no?
FALLO TÉCNICO
El otro día se me ocurrió explicarle a uno de mis compañeros en el trabajo una técnica que utilizo yo para no tener que escribir dos veces lo mismo en la pizarra... y no era hacer que los niños lo copien, no, eso ya lo doy por hecho. Todo comenzó porque le pregunté si era posible escanear una imagen para poder utilizarla en las explicaciones de clase, a lo que él me respondió que sí, pero que tenía que ponerle el logo de la empresa y demás chupipandas que había que hacer para que todo quedase oficial y bonito, pero no era eso lo que yo quería saber exactamente. Yo soy muy dado a dibujar en clase durante las explicaciones* y muchas veces me queda un dibujo esquematizado de lo que quería explicar que se comprende fácilmente por ser muy básico, pero luego, por uno de esos destinos del universo, jamás me vuelve a salir igual o me olvido de mencionar algo la siguiente vez que intento reproducirlo, por eso se me ocurrió en una ocasión hace años echarle una foto con el móvil a la pizarra una vez hubiera terminado con todas las anotaciones que hubiera hecho para poder consultarla y así asegurarme de que no me dejaba nada en el tintero. Tras eso, la pasé por USB al ordeñador** e invertí los colores de la imagen para que el fondo negro de la pizarra y la tiza blanca intercambiaran colores dándole la impresión de ser trazos hechos con lápiz en un folio, dejando así la foto mucho más clara que la original. Una vez terminados los retoques, recorté la imagen dejando los bordes de la pizarra fuera de la parte seleccionada y la pegué en un documento de escritura para así poder utilizarla tanto en ejercicios como en explicaciones futuras sin tener que repetir el proceso entero de dibujarlo todo, bastaba con añadir los ejercicios o actividades que me interesaran en cada grupo al documento e imprimirlo las veces que me hiciera falta, que al fin y al cabo era algo hecho de mi puño y letra y no tenía que preocuparme de derechos de autor.
En fin, que lo que yo quería saber era si podía echarle una foto al documento que yo había hecho en casa, pasarlo del móvil al ordenador, del ordenador a una memoria portáil, de la memoria portátil al ordenador del trabajo, imprimirlo en el trabajo, coger el documento impreso y escanearlo para que lo pudiéramos grabar en otra memoria portátil, pasarlo de ahí al ordenador principal y así poder utilizarlo yo las veces que me hiciera falta en las clases... a lo que mi compañero me preguntó: "¿Y no es más fácil que directamente me pases el documento original por email?". Pues sí, hijo, es más fácil, pero es que todavía no había desayunado en ese momento.
*Y curiosamente, les gusta más a los grandes que a los pequeños.
**Sí, pone ordeñador. Es que mis PCs suelen ser tan viejos que el anterior era una tostadora.
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