Aim wookin on sanshaiiin, uoooh oh oh.
Aim wookin on sanshaiiin, uoooh oh oh.
Aim wookin on sanshaiiin, uoooh oh oh, andónit fill gud!
¡Ya es primavera en Almería!
IN MÓVIL AREA
Qué cosas de la vida, que los pisos van subiendo y los sueldos bajando... menos mal que han cambiado las tornas y ahora son las dos cosas las que bajan. La verdad es que con los 1K €uros que te dan por currar un mes en esas torturas variadas que llamamos trabajo, aunque a algunos les guste (yo es que soy masoquista o algo), como mucho te da para pagar el alquiler, porque si te da por comprar un piso puedes optar por la opción de compartir opcionalmente el piso opcional con compañeros opcionales, o bien por pagar hasta el día del juicio final un apartamento de grande como un armario en el cabrían ámpliamente dos sombreros. Menos mal que ya no puede ir a peor la cosa, que eso ya es un consuelo... bueno, sería peor si el piso fuera "sinsuelo" pero espero no llegar a esos extremos.
El caso es que pasa el tiempo y yo sigo en casa de los papás, como media España, y trabajando para poder irme esporádicamente a colonizar otro piso para formar una legión de hongos y, aunque todo el mundo me dice que me lo tome con calma, es que en las teterías sólo me sirven los tés con azúcar, de mil clases, eso sí, pero nunca con calma. Además, ¿que me tome qué?. En fin, supongo que es de esas frases hechas que en realidad no tienen sentido como "siempre pagan justos por pecadores" o "¿estudias o trabajas?", en ambas frases el que las dice no va a tener en cuenta para nada las posibles respuestas: él va a lo que va (y no tiene intención de ser detenido).
La buena noticia es que las penas con pan se ponen más gordas y como todos los gordos son felices (dicho popular) dejan de ser penas para ser "felicenas", que es la contracción de Feliz + Cena, un plato muy conocido en los restaurantes chinos (La Familia Feliz), razón por la que los budas de la puerta siempre salen sonriendo y con cara de felicidad absurda, ejemplo de que los gordos siempre salen felices, como esos enormes gatos de porcelana de los chinos, que se suponen que atraen la felicidad y el dinero, y como con dinero uno se podría (sobre todo si estás podrío de dinero) comprar lo que quisiera, por ejemplo un piso, pues evidentemente estaríamos felices y comeríamos más y nos pondríamos como focas monje recién ordenadas en el monasterio... para que luego digan que el dinero no da la felicidad.
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