¡Vaya, un árbol de hojas azules y resplandecientes en mitad de un bosque que, curiosamente, deja un cerco de seguridad alrededor de él! ¿Qué serán esas bolitas de luz que flotan a su alrededor? ¿Y por qué tiene todo esa textura borrosa que suaviza los bordes de los escenarios? ¿Estaré soñando... o será que la cámara de mi móvil es tan rematadamente mala que no es capaz de sacar fotografías con una definición medianamente aceptable?
PERSECUCIÓN
Este fin de semana me levanté completamente en tensión la mañana del domingo: tenía todo el cuerpo encogido y al mismo tiempo haciendo fuerza para mantener las articulaciones tensas, no fue muy agradable. La razón fue que tuve un sueño bastante incómodo durante toda la noche* y creo que inconscientemente transmití la sensación mental al resto de mi cuerpo, algo parecido a cuando la gente se pasa hablando toda la noche hablando en sueños pero sin poder descansar nada durante el proceso. En fin, lo que soñé fue esto:
El sueño iba en dos partes:
-En la primera parte yo estaba en una ciudad del estilo a Salamanca o Ávila, con murallas alrededor y edificios de ladrillo antiguos. Las murallas y paredes de los edificios, que parecían catedrales o iglesias a mi entender, eran muy altos, como de dos pisos de alto, y delimitaban completamente el espacio por el que se podía circular, no obstante, había espacio de sobra y las calles y plazas eran tremendamente amplias. Recuerdo que me fijé en esos detalles porque levanté la mirada hacia la parte superior de un edificio, que parecía un campanario en punta, y pude ver el cielo nocturno, aunque no recuerdo que hubiera estrellas o luna y tampoco recuerdo haber visto ningún símbolo religioso en ningún sitio. Daba más la sensación de ser el patio interior de un castillo que una calle en sí, pero yo buscaba constantemente una manera de escapar de mi perseguidor fuera como fuera. El perseguidor era, lo recuerdo bien, un caballero sin cabeza con armadura y capa. Aunque la armadura estaba hueca y no tenía armas con las que amenazarme, yo sabía que no era bueno que me atrapase, así que me pasé corriendo de un lado a otro toda esa parte del sueño.
-En la segunda parte del sueño yo seguía huyendo de alguien que me perseguía, sólo que esta vez mi perseguidor era un hombre muy grande y gordo y en lugar de ir escapar por las calles de una ciudad antigua era por el interior de una casa, lo cual era todavía más agobiante si cabe. No sabía con certeza desde fuera del sueño lo que ocurriría si me acababa atrapando pero sí que tenía claro que no era bueno, así que seguí corriendo intentando darle esquinazo siempre que podía. El interior de la casa era blanco y de estilo moderno, como las casas que salen en las películas futuristas, de hecho, algunas habitaciones no tenían todas las paredes puesto que se accedía a ellas por unas escaleras, sólo tenía claro cuáles eran las paredes que daban al exterior porque eran las únicas que sí conectaban las unas con las otras para mantener el interior cerrado. La casa era enorme y de varios pisos de alto (o de bajo, no me queda claro) y recuerdo que mi única salida era huir del tipo ese constantemente porque no parecía haber ninguna entrada a la casa que no fueran las ventanas, pero al parecer las descarté como salidas no válidas, probablemente por la altura a la que estarían. Pues bien, así hasta que me desperté, probablemente de la tensión acumulada.
La razón del jinete sin cabeza la recuerdo bien: era idéntico al que sale en la taberna de la película Shrek 2, así que supongo que lo copié de ahí, lo que no asocio en absoluto es el hombre gordo del segundo sueño, pero creo que me acaba de venir una idea al respecto. El sábado vi la película "¿Qué pasó con Baby Jane?" y en ella salía un actor que recuerdo que me llamó la atención por ser muy alto y algo obeso**. Cierto es que el actor no se parecía en nada al perseguidor de mi sueño, pero sí que podría ser una versión deformada del mismo puesto que recuerdo que al verlo en la película no me resultó en absoluto violento ni feo. Supongo que asocié el desenlace de la película con su imagen y dio eso como resultado.
Todavía no sé bien de qué iba el sueño, pero sí sé dos cosas: primero, que si hubiera tenido perro me habría despertado mucho antes puesto que los animales sienten estas cosas y te despiertan; segundo, que el domingo me desperté como si me hubieran dado un paliza a pesar de haber dormido casi toda la noche seguida, así que realmente fue peor el remedio que la enfermedad ...Y encima me han puesto una obra justo bajo mi casa esta semana. Si es que no me libro de una, vaya.
*O, al menos, así me lo pareció a mí, pero ya sabéis que dos minutos durmiendo pueden parecer un mes.
**De hecho, llega incluso a darse con las lámparas de la casa donde vivía Bette Davis. Probablemente eso no estaba en el guión.